Wanda Nara habla del diagnóstico de su leucemia: “Mauro Icardi me dijo que se quería retirar”

Fue hace poco menos de un año que Wanda Nara se enteró de que padecía leucemia después de hacerse unos exámenes rutinarios donde los médicos se toparon con unos valores atípicos. Desde ese momento, la mujer de Mauro Icardi sigue un tratamiento específico que lleva a rajatabla a pesar de vivir entre tres países -Turquía, Argentina e Italia- y tener una agenda profesional de lo más apretada. En su última entrevista para el canal de streaming ‘Olga’, la mediática empresaria recuerda cómo se enteró de su enfermedad, su reacción y cómo evoluciona.

“Estoy bien”, comienza dicendo para tranquilidad de todos sus fans después de que le preguntaran por su estado de salud. Además, confirma que continúa sometiéndose a varias pruebas para determinar la causa y algún posible tratamiento alternativo. “¿Cómo te tomaste esto de que se habló tanta pavada y que tu familia se enteró por los medios?”, le dicen desde ‘Olga’. Cabe recordar que tanto Wanda Nara como los suyos conocieron el diagnóstico final por una filtración del periodista Jorge Lanata.

“La verdad es que no tuve mucho tiempo en ese momento para pensar. Me hice un análisis y al día siguiente teníamos que viajar. El club le había mandado a Mauro un avión de cuarenta pasajeros solo para nosotros que ya estaba aterrizado”, recuerda la argentina. “Me hago las pruebas y me llaman enseguida del laboratorio. Ahí me empiezo a asustar. Digo que soy Wanda Nara y la persona que me atiende empieza a temblar, muy nervioso y empiezo a llamar a los gritos a Mauro. ¡Aquí hay algo raro!”, añade confesando que su primera reacción fue el llanto.

“Yo lloraba porque te imaginas lo peor. Lo viví como una película. Estábamos ya con maletas hechas porque nos íbamos y, de repente, me vi con camisón, una pulsera y que me decían: ‘Estás internada’. Le decía a Mauro que me quedaban 24 horas de vida y que nadie me lo estaba diciendo”, sigue contando en ‘Olga’.

La reacción de Mauro Icardi

Al tercer día de ingreso en el hospital, la argentina comenzó a sospechar que se trataba de leucemia, aunque ningún médico le confirmaba el diagnóstico. “En un momento, se abre la puerta y entra una enfermera que me dice: ‘Te juro que eres la última persona en mi vida que quería encontrar en esta situación’, y me abraza. Fue terrible. Ahí enciendo la televisión y fue cuando Lana decía que yo tenía leucemia. Miré a Mauro y le dije: ‘¿Por qué no me lo dicen?’”, añade visiblemente emocionada.

La noticia fue un auténtico shock para la familia. “Nadie entendía qué hacer. Toda mi familia era un delirio. Mi mamá diciendo: ‘Si a vos te pasa algo, yo me muero’, y yo pensaba que mis hijos se quedaban sin madre. Mauro me dijo: ‘Yo me retiro’. Me levantaba de madrugada y veía a mi marido con el celular buscando curas en las islas Caimán. No sé a dónde me quería llevar (...) Ahora me río, pero lo pasamos horrible”, concluye.

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