Una influencer se tatúa ‘Pedro Sánchez’ e incendia las redes: “Es más probable que me decepcione cualquier pareja”
La influencer y educadora social Cristina Bernabé ha desatado la polémica por tatuarse un corazón con el nombre de Pedro Sánchez.
Cristina Bernabé, joven murciana licenciada en Educación Social, jamás imaginó que uno de sus tatuajes sería el detonante de una tormenta viral. Entre dibujos de Britney Spears o la mitológica Medusa, destaca uno que ha acaparado titulares: un corazón con el nombre de Pedro Sánchez en su pierna derecha.
El tatuaje, lejos de ser un gesto romántico hacia una pareja o familiar, hace referencia al presidente del Gobierno. Aunque lo llevaba desde hace tiempo, fue en el programa de Telecinco Tardear donde Cristina explicó las razones de su elección y el trasfondo político del diseño.
“Mis 40 matrículas de honor son más importantes que un tatuaje”
Con un currículum que acumula más de 40 matrículas de honor y un máster en Investigación, Evaluación y Calidad en Educación por la Universidad de Murcia, Cristina rechaza que se la juzgue solo por sus tatuajes. “Mis 40 matrículas de honor son más importantes que un tatuaje”, defendió.
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— Maria cristina (@muchapaya) August 7, 2025
“El odio que he recibido no es por mis tatuajes”, aseguró, convencida de que las críticas más duras provienen de su discurso abiertamente progresista y feminista: “La pedagogía es la base de cualquier cosa”.
El motivo de su tatuaje
El origen del tatuaje se remonta a las elecciones del 23J de 2023, cuando la ultraderecha crecía en intención de voto. “Me pareció icónico, tradicional, divertido”, explicó. Cristina utilizó este tatuaje como una broma y un ‘amuleto’ cuya eficacia no se puede poner en duda.
— Maria cristina (@muchapaya) August 3, 2025
La educadora dejó claro: “No estoy enamorada de Pedro Sánchez”. Incluso bromeó con que, de taparlo, “me podría tatuar a Óscar Puente”. Y orgullosa sentenció: “Es más probable que me decepcione cualquier pareja a que me decepcione Pedro Sánchez”.
Entre el odio y la ironía: su piel como protesta
La viralización del tatuaje vino acompañada de una oleada de insultos en redes sociales: desde “vomitiva” hasta “menuda retrasada mental”. Sin embargo, Cristina respondió con ironía y la chulería propia de quien lleva su piel como lienzo: “Me tatuaría a Gabriel Rufián, a Óscar Matute, a Irene Montero y a Yolanda Díaz”.
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Definida a sí misma como “sexy y lista, feminista y de izquierdas”, la educadora social utiliza su piel como símbolo de protesta y de identidad. “Cuando llevas treinta tatuajes ya te los haces sin trascendencia”, declaró. Su próximo objetivo no está en la tinta, sino en la academia: doctorarse y, quizás, impartir clases en la universidad.
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