Tamara Gorro reaparece en público tras su separación de Ezequiel Garay: “He llorado mucho”

La ‘influencer’ ha acudido a un evento tras su vuelta de Estados Unidos y se ha mostrado muy sonriente y con una actitud muy positiva.

Tamara Gorro por las calle de Madrid
 10/07/020

Tamara Gorro no está pasando por un momento fácil. Sus problemas de salud mental, unidos a su reciente separación de Ezequiel Garay, han hecho que la ‘influencer’ haya tenido que desconectar un tiempo y dedicarse tiempo a estar bien con ella misma. Decidió marcharse a Estados Unidos para desconectar de sus problemas en España y, tras su vuelta, ha decidido volver a salir con sus amigos para distraerse y evadirse de aquello que no le hace bien.

Este jueves, después de mucho tiempo, acudió a un evento público en Madrid y allí atendió a los medios de comunicación, para quienes explicó cómo se encuentra en la actualidad y para quienes solo tuvo buenas palabras para el exfutbolista: “Estoy nerviosilla, bueno, no sé. Es que tengo que hacerlo. Tengo que salir, tengo que maquillarme, tengo que peinarme, irme con mis hijos, es que sino, ¿qué hago?”, comenzaba diciendo Tamara para los micrófonos de Europa Press.

Buenas palabras para Garay

Al ser preguntada por Ezequiel Garay, la ‘influencer’ contestó: “No hablemos de eso porque me emociono, no porque no os quiera contestar. Somos amigos, lo hemos sido, lo somos y lo seremos. Ezequiel es extraordinario. Siempre habrá admiración y deseo”, añade.

Su viaje de desconexión: “En Estados Unidos me levantaba a las seis de la mañana, veía el amanecer, que sabéis que me encanta, y me iba a hacer deporte. Hacía tres horas deporte, lo que nunca. Leer, tenía mucha hambre de leer, me sentaba en la cama y a dormir. Me tiré como dos días solo de dormir, no tenía ganas de nada. Después me iba a caminar”, ha señalado.

La salud mental

“No he venido más liberada del viaje, te mentiría. Ha servido para coger un poquito de aire. Mis hijos, Ezequiel, mi familia, eso es lo que yo más podía desear ver. Eso es fuerza, energía, eso es bueno. Pero una persona cuando no está bien, más con lo que tengo yo y muchísimas personas, estás inestable. Yo he llorado mucho”, confiesa.

“Mi deseo es que mis hijos sean felices, y para que mis hijos sean felices yo tengo que estar bien. Yo sé lo mal que se pasa en esto porque yo lo estoy pasando muy mal. Sé por lo que se pasa y sé lo que tenemos que intentar hacer. Yo no soy un ejemplo de nada. Yo estoy en el camino, con ganas, que flaqueas. Ojalá tenga fecha de caducidad, yo te lo firmo ahora, pero dime una fecha”, ha bromeado Tamara Gorro.