Shakira se une al cántico de moda en el Arsenal

El ritmo del Waka waka viaja sin pasaporte. La expresión, que tiene su origen en el saludo que hacían los soldados cameruneses durante la Segunda Guerra Mundial, fue rescatada del olvido por Shakira para poner en un pentagrama las ilusiones que Sudáfrica 2010 pretendía repartir y que terminaron en España. Uno de los inesperados protagonistas de aquel acontecimiento musical fue Piqué, quien, además de aparecer en el videoclip del tema, empezó su relación sentimental con la colombiana poco después.

Pero eso fue hace 13 años. Ahora la de Barranquilla pone otros rostros a su vida y a su arte. Tanto es así que su famoso Waka waka se ha colado en el norte londinense: el Arsenal ha dado forma a su cántico de moda para celebrar los goles de un Kai Havertz que ha tardado en acoplarse al curso. Con ironía y euforia, como suelen hacer los ingleses estas cosas, han cambiado la letra. Y el éxito ha sido rotundo. La grada canta apiñada, el delantero marca y Shakira da su bendición.

“Waka waka Arsenal Style”

Todo empezó el último día de septiembre. Arsenal y Bournemouth se enfrentaban en un duelo que era de intelecto español. Arteta contra Iraola. Era a domicilio, fuera de Wembley, pero no frenó esto el huracán de la hinchada gunner que, tras endosarle cuatro goles y dejar la portería vacía, asistió al estreno goleador de Kai Haverz. El fichaje estrella había tardado diez partidos en estrenarse. Y diez fueron los minutos que cantaron a garganta descubierta: “Tsamina mina, eh eh; Waka waka, eh, eh; 60 millones por el desagüe; Kai Havertz vuelve a marcar” (en inglés).

Casi dos meses después, Havertz vuelve a ver portería. Y lo hace para dar los tres puntos a su equipo frente al Brentford. El público, que no olvida, carraspeó y, al finalizar el tiempo reglamentario, volvió a entonar al unísono una canción que ya se ha convertido en himno.

Los jugadores, aplaudiendo. En ese instante apareció una cámara para captar todo y subirlo a las redes sociales del club londinense. Shakira, la precursora que unió el fútbol con los vestigios de un saludo militar para crear una canción que dio la vuelta al mundo sin pasaporte, lo vio y reaccionó.

Cuando uno está de acuerdo con una idea hacen falta pocas palabras. A veces, incluso no hacen falta: un gesto es suficiente. La colombiana así lo hizo. Republicó el post oficial y añadió: “Waka waka Arsenal style”.

Allá por 2010 Havertz apenas tenía 11 años. Era uno de esos niños que soñaban con jugar en un estadio de esas magnitudes y que escuchaba cómo la de Barranquilla hacía vibrar un sentimiento entre las selecciones. Ahora lo protagoniza y, cada vez que marca, escucha cómo su burlesca afición le dedica que es una de esas estrellas que veía en Sudáfrica.