La inocentada a Tomás Roncero que no te dejará indiferente
El periodista, encerrado en un parking, fue la víctima de una de las bromas de la gala benéfica de la Fundación Inocente, Inocente, con el presidente del Madrid llamándole para una exclusiva.
Tomás Roncero fue ayer una de las víctimas de las bromas de la Fundación Inocente, Inocente para recaudar dinero en su gala benéfica para los niños con discapacidad y sus familias. El periodista se vio envuelto en una extraña situación en un día que iba con prisa para llegar a comentar un partido de España en el Mundial de Qatar.
Roncero, que tenía que llegar a tiempo al estudio de la Cadena SER para comentar el partido, con la complicidad de sus amigos, fue engañado para ir a comer con ellos. Cuando le dicen que el restaurante está cerca de su destino de la tarde, se relaja y va tranquilo porque ve que le da tiempo. Sin embargo, cuando entran en el parking le dicen por teléfono al conductor que hay dos restaurantes con el mismo nombre y que están en el lugar equivocado, que deben volver a coger al coche para ir al destino.
Ahí el periodista ya se empieza a inquietar porque el tiempo pasa y ve que puede llegar tarde a trabajar. Aunque lo peor está por llegar, ya que no encuentran la salida del aparcamiento. De hecho, llaman a la seguridad del estacionamiento y les dicen que se encuentran en el sótano 3, a lo que el guardia responde que no existe.
Los otros atrapados
Mientras empiezan a dar vueltas con el coche y a golpear todas las puertas para tratar de salir del sótano, aparecen otros personajes en escena que le ponen más nervioso si cabe. Gente diciendo que lleva allí días sin comer, otros coches que entran y no saben salir, un hombre que asegura que no hay escapatoria, que él lleva allí años…
Lo mejor: mientras estos personajes no paran de hacer extraños comentarios alrededor de un estupefacto Roncero, le llama un humorista haciéndose pasar por el presidente del Real Madrid y le dice que tiene una exclusiva para él, que quiere fichar a Messi y Piqué. Roncero, muy diplomático, aguanta el tipo y le dice que en ese momento no puede atender a la noticia.