Ramón García y las lesiones del ‘Grand Prix’: “Se rompieron bastantes cosas”
El presentador ha hablado de cómo trataban los accidentes en el programa: “Según se iban rompiendo cosas, iban haciendo cruces”.
Este miércoles, Julia Otero y ‘Días de tele’ han recibido la visita de uno de los rostros más famosos de la televisión, Ramón García, quien ha brillado en la pequeña pantalla de la mano de ‘Grand Prix’ en la década de los 90 y los 2000. Un programa que sigue dando que hablar, y es que el presentador estaba en conversaciones con Ibai Llanos para traerlo de vuelta.
Pero, en este mítico programa no todo han sido risas, y es que García ha querido recordar también que se han producido muchas lesiones durante la grabación del programa, y que la realización de éstas era muy complicada. “Me acuerdo cuando veo las imágenes. Ese año ganó Guijuelo y, como el delito ya ha prescrito, lo puedo contar. Es verdad que había muchos golpes, porque era un concurso donde las pruebas físicas eran de contacto”, ha comenzado señalando.
Y es que en esos momentos de lesión, el programa tenía establecido un plan para tratar a los concursantes: “Los chicos que cambiaban el decorado rápidamente tenían por detrás, en la madera, ponían ‘brazo, nariz, pierna...’. Y, según se iban rompiendo cosas, iban haciendo cruces”.
“Se rompieron bastantes cosas. Siempre teníamos una ambulancia de guardia y se los llevaban al hospital de turno y, cuando volvían, les firmaba la escayola. Era como la medalla de las Olimpiadas”, ha añadido.
Unas lesiones que llegaban en unas pruebas muy físicas, creadas algunas de ellas en el propio espacio: “Creábamos pruebas, porque el ‘Grand Prix’ era un programa donde fuimos capaces de crear pruebas que se creaban allí, algunas se compraban, otras se vendían a programas del extranjero, porque no deja de ser la industria de la televisión, y nosotros probábamos las cosas”.
Hasta los invitados se lesionaban
El propio Ramón García fue el encargado de probar algunas de estas pruebas, y al igual que los concursantes, éste también tuvo algún accidente, como sus invitados: “Los primeros guantazos... yo me los di muchas veces. Yo probaba muchas cosas. Se me lesionaban hasta los invitados. Marianico el Corto se rompió un tobillo y era un invitado, un padrino. Cristina García Ramos lo mismo: iba andando, se cayó y se hizo un esguince. Era un programa grabado, pero lo grabábamos en tiempo real y no podíamos parar la realización de una prueba. Intentábamos buscar la realización deportiva”.
“Yo decía: ‘Si alguien cae, sacáis el cadáver arrastrando y luego ya veremos’. Y yo seguía, no podía parar. Realizar este tipo de programas era muy difícil. No era nada fácil realizar el ‘Grand Prix’, pero lo importante es que pareciese fácil. La realización era importante, porque los programas eran más estáticos y el ‘Grand Prix’ era todo el rato movimiento. Realizar aquello tenía mucho que ver con el éxito que tuvo, porque era una televisión en movimiento, porque pasaban muchas cosas y todas muy divertidas”, ha concluido.