Rachel Stuhlmann, la influencer que no quiso ser tenista profesional: “No quería vivir el estilo de vida”

Rachel Stuhlmann se ha convertido en una de las grandes sensaciones del tenis mundial. No es jugadora profesional, pero sí que ha sido nombrada como la “influencer de tenis número 1 del mundo” por el blog Outkick, y es que con el paso del tiempo el número de sus seguidores ha ido creciendo, al igual que ella ha ido desatando pasiones.

Ahora, en una entrevista concedida a ‘GiveMeSport Women’, la joven influencer ha pasado a comentar cómo fueron sus inicios en el mundo del tenis, al cual decidió no dedicarse finalmente, y cómo es capaz de lidiar con los comentarios negativos que han ido vertiendo sobre ella en los últimos años.

Rachel se enamoró del tenis, y rápidamente empezó a tener unos referentes, concretamente Rafa Nadal y Serena Williams: “Realmente amaba a Rafa Nadal, y todavía lo hago. Tenía un póster de él en mi pared cuando era pequeña. También amaba mucho a Serena Williams, era mi favorita”. Tenía las referencias, y ella fue cuajando un buen tenis, y por eso se clasificó a nivel nacional en el Circuito Junior de la USTA, pasando a jugar además en el tenis universitario, en la División I de la NCAA.

La influencer lo tenía todo, sabía que podía alcanzar la cima del tenis, pero no quería hacer todos esos grandes sacrificios. “Sabía que era lo suficientemente buena y que eventualmente podría llegar allí. Pero pensé que la realidad era que me llevaría de cinco a siete años llegar a la cima y no quería vivir el estilo de vida que conlleva tocar en ciudades pequeñas, entre otras razones”, ha confesado.

Así gestó su carrera como influencer

Sin embargo, sí sabía que quería seguir ligada al mundo del tenis, y por eso se dedicó a escribir sobre temas relacionados con el tenis: “Siempre tuve ideas y pensamientos sobre el juego que quería compartir, así que contraté a un diseñador de sitios web y comencé a escribir una serie de artículos. Los artículos trataban sobre una variedad de temas: moda en el tenis, comparación de tenistas con sus contrapartes de baloncesto, escritura sobre algunas de las historias de los jugadores y mucho más”.

Fue entonces cuando se fijaron en ella multitud de marcas: “Una empresa de software de tenis se acercó a mí para que le ayudara a encabezar su programa de contenido de tenis. Viajé a muchos lugares, incluso al extranjero, y entrevisté a tenistas en torneos de tenis profesionales. También realicé una variedad de otros trabajos con diferentes compañías en tenis profesional: medios, transmisión, marketing, ventas, patrocinios y asociaciones de torneos, relaciones con los jugadores, eventos, comentarios, programas de radio deportivos y mucho más. Empecé a modelar y trabajar con diferentes marcas y ha sido genial desde entonces. Todo lo que hago dentro del juego está bajo un mismo paraguas, y ese soy yo y mi marca. Me encanta”, ha añadido.