Quién es Íñigo Quintero, el joven coruñés con la octava canción más escuchada del mundo

Que la industria musical es una caja llena de pentagramas y sorpresas nadie lo ponía en duda. Cada cierto tiempo, cumpliendo con un puntual efecto de estrella fugaz que permanece, aparece un nuevo talento joven que irrumpe en la escena con la misma contundencia con la que un ariete de guerra rompe un fino escaparate. Choque que se ve impulsado a día de hoy con el estallido de las redes sociales y su capacidad de difusión, capaz de convertir una canción en himno a golpe de tiktok. Y ha sido precisamente esta red social la que ha potenciado el alumbramiento de una nueva figura. Íñigo Quintero, un joven coruñés de tan solo 22 años, ha logrado una hazaña con pocos precedentes. Su tema Si no estás es el más escuchado de España y ocupa el octavo puesto en la lista de canciones más reproducidas en todo el mundo.

Una íntima balada con golpes modernos ha sido la culpable de que Quintero haya conquistado el cielo antes de cumplir los 23. Su canción ha protagonizado millones de streams y todos los creadores de contenido de la aplicación la han empleado en sus últimos vídeos, convirtiendo a un completo desconocido en una revolución internacional. Sin ir más lejos, el tema suma en Spotify la friolera cantidad de 25 millones de reproducciones y más de 4′7 millones de oyentes mensuales en apenas unas semanas.

Un año como desconocido y una semana como estrella

En la corta trayectoria que tiene le ha dado tiempo a desplegar su carisma y calidad musicales. Natural de A Coruña, Quintero ya ha dado luz a otras canciones. Sobredosis, Sin tiempo para bailar o Será por ti son algunos de sus sencillos que, igual que el autor, han subido sus cifras a una catapulta que ha enviado a la estratosfera los datos de reproducciones. Pero Si no estás es diferente. La canción lleva publicada desde el 22 de septiembre de 2022. Más de un año.

Según ha reflexionado Cris Regatero, periodista de Los 40, la letra de la canción es una alusión a las creencias y, concretamente, a la pérdida de la fe y de Dios. Esto daría un vuelco al pensamiento de la mayoría de personas, que abogan por interpretarla con un matiz sentimental. “Representa a una nueva generación de artistas que hablan del amor desde otro prisma: el de la fe”, apunta la comunicadora. Está en duda si Quintero pertenece a la corriente de artistas cristianos que ha florecido en los últimos años. Pero de otra cosa no hay duda: el cielo lo ha besado.