Qué fue de Javier Rigau, el empresario catalán con el que se casó Lollobrigida en 2010
La pareja tenía intención de casarse unos años antes, pero finalmente suspendieron su enlace. La italiana no participó en su boda y el caso fue a los tribunales.
La muerte de la musa italiana Gina Lollobrigida a los 95 años de edad ha sacado a colación decenas de historias vividas por la actriz en casi un siglo de vida. Entre ellas, uno de los episodios más polémicos sucedidos alrededor de su figura: su polémico matrimonio con el empresario español Javier Rigau, al que sacaba 34 años de edad, y que terminó en los tribunales.
La historia de Rigau y Lollobrigida se remonta hasta la década de los 80, aunque la encargada del hogar de la familia del catalán dató la fecha del inicio de la relación en 1976. No se sabe bien cómo, pero según los testimonios la pareja empezó a quedar en Barcelona. “Se trataba de relaciones sexuales plenas y así quedaba constatado cuando se tenía que arreglar por parte del servicio el dormitorio y cuarto de baño utilizado por ambos”, declaró la mujer en palabras recogidas por La Razón.
Por aquella época, Rigau tenía 15 años, mientras que la actriz italiana ya rondaba los 50. En 1949, la intérprete ya había pasado por el altar con el médico Milko Skofic, del que se divorció en 1971. Su romance se mantuvo en un estricto silencio hasta 2006, cuando ambos hicieron público en el ¡Hola! que tenían intención de casarse. “Nos conocimos en 1984 en Montecarlo. Por aquel entonces, Javier, que siempre había ido mucho a Mónaco con su familia, estaba en ese ‘party’. Después nos vimos al día siguiente y al siguiente, hasta hoy”, expresaba por aquel entonces Lollobrigida.
Una boda cancelada y otra poco usual
A pesar de la exclusiva que le dieron a la revista y de que ambos quedaron en el foco de los medios de comunicación, la boda planeada para 2007 nunca se celebró. Públicamente Rigau, mediante un comunicado publicado en ¡Hola!, señaló como motivo “las constantes e inveraces intromisiones ilegítimas en el honor e intimidad”. Sin embargo, el protagonista explicó más tarde que la suspensión fue unilateral “porque tanto en Italia como en España empezaron a decir los medios que nosotros habíamos empezado a acostarnos cuando yo era menor de edad. A ella la llamaban “asaltacunas”, ninfómana, sinvergüenza y de todo”.
A pesar de que la historia parecía haberse quedado ahí, en 2013 Lollobrigida denunció en la prensa de su país natal que estaba casada desde 2010 con el empresario sin haber sido consciente. Según su versión, Rigau le había hecho firmar unos papeles que habían resultado ser un poder especial suficiente para celebrar el enlace.
La defensa del empresario fue que la boda se había celebrado el 29 de noviembre de 2010 “con el pleno conocimiento de ambos contrayentes, así como de sus representantes legales”. El caso, aunque fue llevado a la justicia por la actriz, no se resolvió de forma positiva para sus intereses, pues la justicia le dio la razón al español.
Lejos de la vida pública
En todo momento, Rigau ha intentado mantenerse alejado de la vida pública. Incluso a raíz de que el Papa Francisco firmase en 2019 la concesión de la anulación del matrimonio que puso fin a toda una historia que ella calificó como “uno de los mayores errores de su vida”. El empresario, mientras tanto, en 2020 “seguía con sus negocios de siempre: los inmobiliarios y la gestión de residencia de ancianos”, tal y como detallaba El Español.