¿Por qué se usa ropa interior roja en Nochevieja y cuál es el origen de esta tradición?
Estas fiestas están llenas de tradiciones y supersticiones, especialmente cuando acaba el año y queremos hacer borrón y cuenta nueva para el siguiente.
Aparte de tomar las doce uvas con las campanadas de final de año, en España tenemos más tradiciones asociadas a estas fechas tan especiales y cuyo origen es de lo más dispar. La de las uvas, por ejemplo, se debe a un exceso de producción durante una cosecha a comienzos del siglo pasado, lo que hizo que todos las tomasen con las campanadas como un gesto de fortuna, ya que los productores las vendían en paquetes bajo el nombre de “uvas de la suerte”.
Quizá esta sea la más conocida, pero no es la única. Otra de las que intentamos llevar a cabo siempre tiene que ver con la ropa interior que usamos para despedir el año y recibir el nuevo. Más que con la prenda en sí, lo que se tiene en consideración es el color: rojo pasión.
Pero ¿sabemos por qué llevamos este color? El origen se encuentra bastante lejos, en China, donde se asociaba este color a la suerte, el éxito y la fortuna. De ahí que se quisiese portarlo para tratar de atraerla. Por ejemplo, hay muchas personas que, en lugar de vestirse con lencería de esta tonalidad, lo que hacen es llevar un lacito rojo en la muñeca o cosido a su ropa.
Otra curiosidad: ¿por qué llevamos el color en la ropa interior y no en la indumentaria que va a la vista de los demás? La respuesta es muy fácil, y que este color estaba prohibido por la Iglesia durante la Edad Media, de ahí que se tuviese que llevar oculto, en las prendas más íntimas.
No basta con llevar las prendas rojas
Para atraer a la suerte, el ritual estaría incompleto si solo llevásemos estas prendas por debajo de la ropa escogida para ese día. La tradición dice que nos tenemos que deshacer de ellas también. De hecho, es popular que se quemen.
El origen de esto estaría también en el simbolismo. Es decir, al poner las prendas estamos atrayendo aquello que pedimos con ese color, pero, al deshacernos de ellas, al quemarlas o tirarlas, lo que estamos significando es que cerramos una etapa, donde borramos todo lo relacionado con ella, y estrenamos un nuevo año que traerá un giro en la suerte.