Segunda vida, primeras emociones: los productos reacondicionados arrasan esta Navidad
Bicicletas, máquinas de fitness, pádel o golf de segunda mano se convierten en propuestas de regalo para quienes buscan algo que se viva, no que se acumule.


Hay regalos que se olvidan y regalos que se viven. La primera pedalada en una bicicleta nueva, la sensación de dominar un ejercicio, esa sensación de conectar un golpe perfecto en un partido de pádel o ese golpe de golf que vuela más allá de lo que imaginabas.
Y no es necesario estrenar equipamiento para vivirlos. De hecho, los productos reacondicionados están cada vez más generalizados y arrasan entre los compradores por sus mejores precios y entre quienes buscan la sostenibilidad. Una apuesta que es cada vez más común encontrar también en las propias tiendas, como Decathlon.
Porque detrás de cada bici, máquinas de fitness, pádel o golf reacondicionados hay algo más que un simple producto deportivo: hay una oportunidad de volver a disfrutar, de descubrir, de empezar. Una forma de regalar experiencias sin renunciar a la accesibilidad ni a un consumo más consciente a la hora de elegir un regalo.
Nuevas historias
En los espacios de segunda vida de Decathlon conviven bicicletas listas para conquistar nuevos caminos, elípticas o cintas de correr que vuelven a marcar un ritmo, palas de pádel que esperan su próximo partido o palos de golf preparados para volver a sentir un buen golpe. Todos han sido revisados en los más de 147 talleres que la marca tiene en España, que cuentan con más de 700 técnicos especializados asegurando que cada artículo esté en perfecto estado para su siguiente uso.
Solo en 2024, la compañía realizó alrededor de 439.000 reparaciones en España, lo que permitió que miles de productos volvieran a funcionar. Como resultado, el año pasado se vendieron en el país más de 181.000 artículos de segunda vida: regalos con historia y con futuro, que mantienen su calidad, prolongan su uso y, además, ofrecen precios más accesibles.
Una solución que crece con cada niño
Además de apostar por los regalos de segunda mano, la marca ofrece un servicio de suscripción de bicicleta infantil en tienda física u online con recogida en tienda en solo una hora, una opción de regalo navideño especialmente práctica para las familias. Regalar una suscripción significa ofrecer una bicicleta que se adapte al crecimiento de los más pequeños: permite cambiar de talla siempre que lo necesiten e incluye revisión, mantenimiento y seguro, desde 4 euros al mes para que sigan disfrutando de la bici sin complicaciones.
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De media, un niño necesita cambiar de bicicleta cada 18 meses para ajustarse a su ritmo de crecimiento; entre los 3 y los 13 años puede llegar a necesitar entre seis y siete bicicletas distintas. Consciente de esta realidad, la compañía ha diseñado un servicio que crece con ellos, ofreciendo una solución flexible, accesible y pensada para acompañar cada etapa de su camino sobre dos ruedas. Un regalo que no solo se disfruta en Navidad, sino durante todo el año.
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