FAMOSOS
Maite Galdeano habla por primera vez del cáncer de sangre que padece: “Puedo pedir eutanasia”
La madre de Sofía Suescun concede una exclusiva a la revista ‘Lecturas’ donde se sincera sobre su enfermedad: “Me salió cuando tenía 38 años”.
El pasado miércoles, Sofía Suescun sorprendía a todos revelando que su madre padece cáncer de sangre. Una noticia que caló como un jarro de agua fría entre los miles de seguidores de la televisiva. Ahora, es la propia Maite Galdeano la que a golpe de exclusiva en la revista ‘Lecturas’ habla por primera vez de su enfermedad. “Me salió cuando tenía 38 años”, comienza diciendo la exconcursante de ‘Gran Hermano’.
Respecto a cómo y cuándo le fue detectada esta enfermedad, Maite Galdeano explica que fue en la Clínica Universitaria de Navarra. “Me hicieron pruebas de contraste y demás, es genético. Es una enfermedad desconocida y por eso no la saben dominar bien”, dice en declaraciones para el citado medio. No obstante, esta no es la única dolencia que afecta a la madre de Sofía. “Tengo artritis, fibromialgia, hernias, cefalea y gastritis crónica. Me han arrancado la tiroides y se me ha desplazado una rosca de la columna”, añade.
“Si yo quisiera, podría solicitar la eutanasia. Me la podrían aplicar porque conmigo lo tienen chungo, no me pueden medicar porque mi cuerpo o mi sangre no lo admite, o una medicación choca con otra… Yo sería una candidata de las que me tumban y ‘ciao’”, afirma. A pesar de estos contratiempos de salud, la navarra se muestra muy optimista y no duda en seguir adelante con su particular lucha. “Dios me ha traído muchas enfermedades porque quiere que esté siempre al lado de mi hija”, expresa. Y es que Maite Galdeano nunca pierde su particular sentido del humor, ni siquiera hablando de estos temas tan serios.
Su capítulo más oscuro
En un momento de la entrevista con ‘Lecturas’, Maite Galdeano deja a un lado el humor para hablar seriamente de uno de los capítulos más oscuros de su vida. La que fuera concursante de ‘Gran Hermano’ revela que llegó a plantearse el suicidio: “Me fui a las vías del tren. Después, al saber lo fuerte que era esta enfermedad, pensé: ‘con dejar de tomar la medicación, me da un trombo y adiós”. “¿Qué es lo que me hizo cambiar? Mi Sofía, ella me quitó la idea de la cabeza. Me di cuenta que tenía que luchar por ella, aceptar la puta enfermedad, hacer lo que me dijera la hematóloga y punto pelota”, concluye.