SEMANA SANTA

Los elementos de la ropa de nazareno en Semana Santa: túnica, capirote, cíngulo, capa...

La ropa de los nazarenos es uno de los elementos más reconocibles y característicos de la Semana Santa. Detallamos lo que hay que saber sobre ella.

Detalle del barro caído sobre los nazarenos a su paso por la Carrera Oficial, a 24 de marzo del 2024 en Sevilla, (Andalucía España). La Semana Santa es una de las celebraciones más importantes para los católicos, y en Sevilla se vive con especial fervor. Cerca de sesenta cofradías recorren las calles de la ciudad entre el Viernes de Dolores y el Domingo de Resurrección.
24 MARZO 2024
Joaquin Corchero / Europa Press
24/03/2024

La Semana Santa ya está aquí. Uno de los momentos más importantes marcados en rojo por parte de todos los fieles al catolicismo vuelve un año más, y las hermandades están preparadas, saliendo a la calle en procesión, portando la imagen sagrada. Los nazarenos son uno de los grandes protagonistas de este evento, y hay que tener diversos detalles en cuenta sobre ellos.

Uno de los elementos más llamativos e identificativos sobre los hermanos de la cofradía que sale en procesión de penitencia es la ropa que portan. Este es uno de los conceptos más característicos de la Semana Santa, por lo que merece la pena repasar todos y cada uno de los detalles de los que se compone el uniforme de nazareno.

Las prendas de un nazareno en Semana Santa

El capirote

Este es uno de los elementos más reconocibles de todo nazareno. El capirote es una especie de cono que se coloca por encima de la cabeza. De acuerdo con la revista Habla, los orígenes de esta prenda podrían estar situados en los orígenes de la Inquisición, en el siglo XV. En este caso, las personas, cuando eran sancionadas, eran obligadas a ponerse un elemento de tela que les tapaba el pecho y la espalda, que acompañaba al propio capirote.

También conocido con el nombre de ‘capuz’, suele estar formado por un armazón, que generalmente está hecho de cartón. Además, hay que mencionar, de acuerdo a lo que apunta Cosas de Reli, que está compuesto por una funda de tela que alcanza la cintura de la persona que lo lleva. También conocido con el nombre de ‘antifaz’, cubre la cara del nazareno por completo, pero hay que resaltar que deja dos aberturas para los ojos.

La túnica

Por otro lado, merece la pena repasar la importancia que tiene la túnica en las prendas de vestir de un nazareno en Semana Santa. Generalmente de color blanco, puede ser de dos clases: de ‘capa’ o de ‘cola’. En el caso de la primera, suelen ser las que llevan este elemento y sus colores varían, dependiendo de la hermandad que la porte. En el supuesto de la segunda, cabe mencionar que es un tipo de túnica larga, especialmente, por la parte trasera, que llega hasta el suelo.

El cíngulo

Acompañando a la túnica, hay un cinturón que se suele ceñir a la cintura del nazareno, con el objetivo de que no se suelte ni sea incómoda para la persona que lo porta. En este caso, el material puede variar, ya que puede ser de esparto, o bien, de seda. En el supuesto de que se escoja la segunda opción, este concepto es conocido con el nombre de cíngulo o cordón, tal y como apunta Promomark.

De acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española, RAE, el cíngulo es un “cordón o cinta de seda o de lino, con una borla en cada extremo, que sirve para ceñirse el sacerdote el alba”.

La capa

Asimismo, otro de los elementos más representativos que se pueden encontrar en el uniforme del nazareno es la capa. Se suele colocar por encima de la túnica que, como se ha mencionado anteriormente, puede funcionar de complemento del elemento antes citado.

Sobre este complemento, hay que mencionar su historia. Según informa ABC de Sevilla, se introdujo a mediados del siglo XIX, ya que las hermandades tomaron la decisión de independizar la cola de la túnica. Eso sí, hay que mencionar que el estilo ‘juanmanuelino’ no se estableció hasta el año 1888, a finales de siglo.

Guantes, zapatos o hebillas, otros de los elementos fundamentales

Por otra parte, en el uniforme del nazareno nos podemos encontrar elementos tan fundamentales como pueden ser los guantes, las hebillas, las botonaduras o los zapatos, que pueden ser negros o de esparto, un material de lo más recurrido. Asimismo, los escudos de la hermandad también se encuentran presentes. Por supuesto, algo que es imprescindible para cada nazareno son los cirios.

Esta vela, que suele estar hecha de cera, es larga y gruesa, y es una de las señas de identidad de todos aquellos que son nazarenos. De acuerdo con El Correo de Andalucía, este concepto forma parte de las procesiones, ya que los que salen suelen utilizarlas como ofrendas de fe. Pueden ser de varios colores, y, de hecho, en la misma hermandad, la gama cromática puede ser diferente.