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Las tres razones por las que Leo Harlem ha dejado de ver al Barcelona

El cómico reveló en ‘El Hormiguero’ que ya no es futbolero por el auge de las apuestas, por las vinculaciones políticas y por el fingir de los jugadores.

Las tres razones por las que Leo Harlem ha dejado de ver al Barcelona

Leo Harlem acudió al plató de ‘El Hormiguero’ para presentar el nuevo espectáculo que protagonizará en Madrid el próximo mes de marzo y reveló un aspecto totalmente desconocido sobre él. El cómico leonés, para asombro de Pablo Motos, aprendió catalán gracias al FC Barcelona. “Aprendiste a retransmitir partidos del Barça en catalán”, expresó el presentador animando a su invitado a que diera más detalles. “En esa época yo era muy futbolero, entonces había vídeos de partidos memorables del Barça que solo venían en catalán”, confesó Leo. “A base de verlos me salía el catalán”, agregó antes de brindar una demostración con una retransmisión en la que mencionó a mitos como Romario o Guardiola. “Todo esto es de escucharlo veces y veces y veces”.

Sé mucho en general de fútbol. Me he desconectado mucho últimamente, las cosas como son”, continuó. Y es que Harlem ha insistido en lo mucho que le ha gustado el fútbol a lo largo de su vida, pero recientemente todo eso ha cambiado por tres poderosas razones. “Siempre he sido muy futbolero, y de la Selección Española y de jugadores sueltos. Es que me ha encantado el fútbol, me ha gustado mucho. Pero últimamente estoy cansado”.

En primer lugar, Harlem menciona las apuestas deportivas: “Cuando entró el tema de las apuestas y tal no me gustó”. En segundo lugar, la relación que el fútbol tiene con la política y en algunas ocasiones ha dividido incluso a la afición de un mismo club: “La vinculación excesivamente política de los clubes tampoco me gusta”.

Y por último, lo que él denomina como falta de nobleza: “Ahora se está jugando al fútbol, y permíteme que lo diga en tu programa, se juega como con la pandemia. Como no había público tú dabas un chillido y te dejabas caer: falta, te la pitaban. Y ahora se está volviendo a jugar así y no me gusta. Se pierde mucho tiempo, a un tío le dan en el hombro y se toca la cara, le dan en un tobillo y se coge el otro... ¡Pero céntrate! Si es que se ve... Me gustaría que hubiera un poquito más de nobleza”, sentenció el actor y humorista.

Su defensa de “la tasca española”

Leo Harlem analizó después lo que considera una “invasión” del inglés por la cantidad de términos que se utilizan ahora en los bares y restaurantes: “Vas a los sitios y no ves ni una palabra en castellano. Afterwork, brunch, los nombres de los cubatas... Todo está en inglés. Me parece excesiva la invasión esta”, declaró.

Me gusta mucho ese bar de toda la vida, de terrazo, con esa vitrinita, ese tío hostil, la bayeta que tiene mierda que eso ha limpiado la entrada de Altamira... Pero que da sabor. Esa cortina de macarrones de plástico que cuántas gafas ha arrancado (...). Era para las moscas, decían que era para que no entraran pero en realidad era para que no salieran porque estaban todas dentro del bar. ¡Cómo nos hemos criado!”, recordó divertido antes de analizar otros detalles como el baño, la cisterna o “la cartulina higiénica” en lugar del papel higiénico.