JUSTICIA
La indemnización a María del Monte por el robo en su casa: un tercio del botín
La cifra es mucho menor que el botín, en parte, porque la alarma y las cámaras no estaban operativas y, para más inri, la tonadillera lo sabía.
Ya ha pasado una semana desde que el nombre de Antonio Tejado rebotase en todos los medios, causando un eco que, apenas dos días más tarde, se triplicaba con el anuncio del acuerdo para le ingreso en prisión provisional que dictó el juzgado de Instrucción número 16 de Sevilla. El quid de la cuestión, el hecho por el que todo el país quedó atónito, fue su participación como autor intelectual en el robo que se cometió en la casa de su tía, María del Monte, e Inmaculada Casal.
La banda que acometió aquel golpe se llevó un botín superior al millón de euros. Entre el montón final, joyas, relojes y 14.000 euros en efectivo, así como importantes objetos cargados de un incalculable valor sentimental. Ahora ha salido a la luz la cantidad que la aseguradora Helvetia le ha entregado a la tonadillera. Y para sorpresa de muchos, es una cifra bastante inferior: 267.639′15 euros.
Dos claves y un ‘pellizco’ pendiente de liquidación
Si bien es cierto que la cuantía es bastante inferior, para entender esta realidad hay que enfatizar que las aseguradoras calculan el importe total según el valor que los objetos sustraídos tienen en el mercado actual. Es decir, que la compra de lo robado fue en su día más cara que el precio que hoy tiene.
Además, según el informe de los peritos de la citada empresa, otro pequeño detalle de la circunstancia ha sido vital para entender por qué la cantidad de la indemnización ha bajado tanto: la alarma de la casa, así como las cámaras de seguridad, no estaban operativas y, para más inri, la cantante lo sabía. Como no valoró que aquello pudiera revestir mayor problema, la aseguradora se ha visto a reducir la cifra.
“Ningún tipo de medida para el restablecimiento de ambas protecciones contra riesgo de robo”, es lo que se alega en el informe. En palabras de uno de los peritos: “Hubiese podido detectar el intrusismo y, por tanto, reducir el tiempo de intervención en el interior de la vivienda”.
Pese a ello, todavía puede la tonadillera incrementar un poco más la cifra si lograra reponer los efectos y acreditase que el importe se ha empleado para comprar objetos similares a los robados. Así podría ingresar otros 41.231′37 euros que, por el momento, permanecen pendientes de liquidación y que, de sumarlos, elevaría la cuantía final de la indemnización a 308.870′32 euros.