La desconocida empresa de Isco y Sara Sálamo que les une a Madrid
El futbolista y la actriz crearon la sociedad Isla Noviembre S.L., donde invierten en el sector inmobiliario hoy en día, y que tiene sede en la capital.
Isco se encuentra ahora mismo sin equipo. A pesar de ello, el andaluz continúa entrenándose, tal y como demuestra a través de sus redes sociales, y con el fin de encontrar un club con el que volver a pisar los terrenos de juego y en el que vuelva a sentirse como en casa.
Y es que Madrid se ha convertido en eso precisamente, en su casa. Aquí ha pasado prácticamente nueve años de su vida, entre 2013 y 2022; un período en el que han nacido sus tres hijos, Francisco, Piero y Theo, y en el que también quiso unir, más aun, su vida a la de Sara Sálamo con la creación de un negocio en común, Isla Noviembre S.L.
La pareja lleva unida desde 2017, pero en 2020 decidieron invertir en un proyecto en el que ambos ocupan el cargo de administrador mancomunal al 50%, que significa que para todas las decisiones que se tomen en la empresa deberán estar de acuerdo ambas partes.
Este negocio ha ido creciendo en los últimos años, llevando a cabo el “estudio, preparación, promoción, desarrollo y ejecución de todo tipo de negocios inmobiliarios, y la compra, venta, arrendamiento y explotación, en cualquier forma, de inmuebles, así como la promoción”.
A finales de 2022 compraron otro inmueble
Estos bienes pasaron de ser cuatro a cinco a finales del 2022, cuando la pareja sumó un nuevo inmueble a su cartera, un lujoso piso en la zona del parque del Retiro, en pleno centro de Madrid, de 153 metros cuadrados, con cuatro dormitorios, un salón, un comedor, cocina y dos baños. Una vivienda que podría no estar al alcance de todos los bolsillos pues, según el portal de ‘Idealista.com’, los inmuebles de la zona rondan entre los 2.000 y los 2.500 euros al mes de arrendamiento.
Respecto a la empresa en sí, esta arrancó con un capital inicial de casi 400.000 euros, y rápidamente empezaron a invertir, con un piso de 92 metros cuadrados y otro de 77 metros cuadrados, ambos en la zona del centro de la capital, como señala ‘El Confidencial’.
Casi un mes después, Isco y Sara apostaron por invertir en el piso de al lado del anterior, teniendo así las letras A y B del mismo edificio; y en noviembre del año pasado adquirieron otra vivienda de 76 metros cuadrados.