La casera de Julián Contreras, tras desahuciarlo por impagos: “Me debe más de 20.000 euros”

¡De Viernes! rescató públicamente a Julián Contreras tras varios años alejado de la televisión. Aun así, el hijo pequeño de la difunta Carmina Ordóñez sigue sin levantar cabeza por culpa de sus graves problemas económicos que le llevaron a ser desahuciado de la vivienda que alquiló en Móstoles tras más de años sin abonar el alquiler a la parte arrendataria.

Aránzazu, su excasera, ha roto su silencio en Vamos a ver, donde ha desgranado detalladamente la actitud manifestada por el hermano de Fran Rivera a lo largo de estos años. Ella asegura que Contreras le debe unos 30.000 euros, dado que tampoco ha pagado ninguno de los recibos de luz y agua desde que ingresase en el inmueble a principios de 2020. “No sé exactamente la cifra de lo que me debe porque no es solamente lo que no ha pagado, también están los recibos que ha dejado a deber (...) La cifra está más cerca de los 30.000. Es que no te puedo dar una exacta porque también entran los intereses y cosas que son importantes”, cuenta.

Las dudas empezaron a florecer en marzo de ese mismo año, momento en el que estalló la pandemia de la COVID. El exconcursante de Gran Hermano VIP se escuda en que no puede pagar el alquiler por la falta de ingresos. La casera, que también atravesaba una situación similar, entendió sus problemas y no le presionó por los impagos. Una tregua de la que se aprovechó el inquilino, quien se dio alguno que otro capricho. “Dentro de lo que hablo con él, ves que hay diferentes opciones que te está dando el estado para pedir ayuda de alquiler, el mínimo vital y tal. Él no te informa de hecho esto y esto, tienes que estar tú persiguiéndolo y luego veo que se ha hecho un injerto en una clínica”.

“Me dejó la vivienda bastante mal”

Un desplante que inició una guerra entre Aránzazu y el hijo de Carmina Ordoñez. “Se le reclama la cantidad en junio de 2020 y se le dan los 30 días legales para evitar enervar la acción: me pagas o entramos por vía judicial”. La única respuesta de Contreras era que “no podía pagar”. Él se declaró vulnerable cuando recibió la notificación de la denuncia en diciembre de 2020. Casi tres años de lucha por culpa de la carga de los juzgados a raíz de la pandemia y por la estrategia del abogado del televisivo para demorar y paralizar el proceso. “Me dejó la vivienda bastante mal”.

Para finalizar, Aránzazu ha criticado las informaciones que afirman que su exinquilino no ha pagado por el alquiler por las deudas que tiene entre manos. “Este señor ha dejado de pagar el alquiler porque dentro del dinero que tiene prefiere utilizarlo para otras cosas, no porque un juez le haya embargado la cuenta y le haya dejado a cero. Eso no lo hace nadie”.

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