Kiko Rivera, en la primera UEFA del Sevilla: “Me quedé dormido en la cama de Monchi”

Francisco José Rivera (Kiko Rivera) (Sevilla, 1984) es un verso libre en la familia Pantoja. Alejado del mundo de los toros y de la televisión, el DJ y productor lleva doce años labrando su camino en la música. Durante la primera parte de la década de los 10 saltó al estrellato con canciones como Quítate el Top o Así soy yo. Un estilo sonoro basado en el electro latino al que quiere volver en 2023 con el himno del Rayo de Barcelona de la Kings League y con un tema “muevepistas” que llegará antes del verano. De sus ritmos, de la competición gestionada por Gerard Piqué, de su estado de salud tras el ictus que sufrió en 2022 y, sobre todo, de fútbol y de ‘su’ Sevilla nos habla en esta entrevista.

Lo primero, y lo más importante. ¿Cómo estás de salud?

Estoy muy bien, gracias a Dios. Estoy cuidándome a lo máximo posible. He perdido unos cuantos kilos. Sí que es verdad que últimamente se me está yendo un poquito la mano. Pero bueno, es que se acerca también el verano y es complicado. Pero de salud muy, muy bien.

¿Cómo surgió la opción de componer el himno del Rayo de Barcelona?

Apareció de repente, de golpe y porrazo. Me puse en contacto con Spursito (presidente del equipo) para decirle que tenía una idea para el himno de su equipo. Él me dijo que ya tiene otro en Puerto Rico y que no sabe si puede elegir este o no, pero yo igualmente se lo mando. Las cosas que pasan en la vida que al final les ha gustado tanto que se ha quedado. Y, además, lo está pegando bastante, cosa que me hace muy feliz.

Estabas, además, en pleno proyecto con tu primer disco entre manos

La verdad es que se supone que todo iba a ser más lento. Yo tengo varias canciones en el cajón, pero después de hablar con mis compañeros y con la discográfica no sabemos aún si el disco va a ser físico o digital. Le íbamos a dedicar un tiempo a ver cuál iba a ser la primera, cuál la segunda y a terminar de hacerlas. Pero con todo el éxito del himno del Rayo de Barcelona nos hemos puesto una marcha más y vamos a adelantar cosas que nos iban a llevar un poco más de tiempo. Por eso, dentro de muy poco saldremos con un single nuevo que va a ser un mueve pistas. Va a ser una fantasía de canción que todo el mundo se va a aprender muy rápido. Además, al oyente le va a trasladar a una época muy chula de su vida y le va a llevar al verano.

Volvamos al himno. “Desde niño empecé jugando en el patio. Con mi balón soñando en llegar alto. Que coreen mi nombre, salir en los diarios. Pisar los mejores estadios. Nunca dar una bola por perdida. Luchar hasta el final sin que nadie lo impida. Aprender y levantarme tras la caída, darlo todo por el club de mi vida”. Parece que hablas de ti.

Es que estoy hablando de mí. La canción, aparte de ser fiesta porque requiere serlo por Spursito y por lo que se lleva ahora, también tiene su parte bonita. En la letra hemos intentado captar el sueño de la mayoría de niños y niñas que hemos querido ser futbolistas y no hemos podido por diversos motivos. Ese parrafito, probablemente la mayoría de chicos y chicas, si se paran a entenderlo seguro que se sienten reflejados. Y eso es lo que hace a este himno tan grande. Porque tiene su parte de fiesta en la que todo el mundo levanta las manos, pero también su parte de sentimiento. Casi todo el mundo se emociona porque han soñado con disfrutar del Bernabéu o del Camp Nou. O jugar contra Casillas, Mijatovic o Messi. Hay muchos niños que sueñan con eso y es muy bonito que quede reflejado en una canción tan maravillosa que, para mí, es la bomba.

Has tenido la posibilidad de hacer colaboraciones con artistas de la talla de Henry Méndez, Dasoul, Los Rebujitos o Decai. ¿Con quién te gustaría trabajar en un futuro?

Por gustarme, me gustan muchísimos porque soy un amante de la música. Pero, a día de hoy, artistas que estén sonando ahora que a mí me gustaría porque me encaje su manera de ser, ninguno. Si te digo la verdad, ahora mismo ninguno. Muchas veces cuando me han preguntado he dicho Daddy Yankee o Don Omar, pero por decir alguno. Pero realmente me da igual. No quiero hacer una canción con Daddy Yankee o con Don Omar. Yo quiero hacer una canción con quien quiera hacerla conmigo. Con quien quiera compartir ese momento, porque es el momento más bonito de un artista. Es cuando nace tu hijo, que es tu canción, y entonces deja de ser tuya para empezar a ser de todos los demás y que cada uno la disfrute a su manera. Todos esos artistas que les apetezca, como me ha pasado con Rebujitos o Decai y con pocos más, Shakira Martínez, Hendy Méndez, y poco más. Todas las demás colaboraciones son porque las tienes que hacer. Hay una gran diferencia en hacer una colaboración que está medio obligada u obligada del todo porque es necesaria para el mercado a una colaboración que nace del corazón y en la que todo fluye porque existe una conexión real entre artistas. A día de hoy, si alguien no opina como yo, por mi parte yo no quiero. ¿Qué pasa? Que, por trabajo, posiblemente, van a venir colaboraciones que las tengo que hacer. Que no digo que a lo mejor haga una colaboración con ‘X’ y, de repente, empezamos una amistad maravillosa. También puede ser, pero en principio solo me apetece hacer canciones con la gente que quiera hacerlas conmigo. Me da igual que te llames Pepito que Manuel Turizo.

Durante años, especialmente al comienzo de tu carrera, se decía mucho que el tipo de música que hacías no era música. ¿Qué le dirías ahora a esos críticos?

Les diría que se actualizasen. Que dejaran a las nuevas generaciones enseñar su talento, que es lo mismo que nos está pasando ahora. El electro latino tuvo una explosión de la leche. Todos los sitios donde ibas, discotecas o fiestas de pueblo, eran electro latino. Eso se acabó para dar paso a lo que es el reggaeton actual. Y hay que dejar pasar a esas nuevas generaciones y adaptarte. Siempre va a haber gente que le guste la música un poco más antigua (vamos a llamarlo así, porque para mí una música buena nunca es antigua). Como por ejemplo Michael Jackson, que te metes en medio de una sesión un Thriller y la gente lo encaja perfectamente. Por lo bueno nunca pasa el tiempo. Yo le diría a esa gente que se actualicen, que salgan a la calle, que cambien su playlist un poco y que se modernicen y vayan conforme a la época que estamos viviendo.

Hablando de ‘antiguos’, de Joaquín Sabina en el documental ‘Sintiéndolo Mucho’ se decía que lo que más le inspiraba era el desamor. ¿Qué le inspira a Kiko Rivera?

Depende del estado de ánimo que tenga uno le apetece hacer un tipo de canciones u otro. Si que es verdad que mis últimas canciones han sido menos fiesteras, hemos captado un público más mayor, fiel pero más mayor, pero se ha perdido ese Kiko Rivera del Chica Loca o Quítate el Top. Y este himno tiene las dos. Quiero volver, y es algo que me apetece decir porque es como me siento ahora. No sé cuánto tiempo será, o si van a ser una canción o dos, depende del estado de ánimo. Pero ahora vuelve el Kiko Rivera que te hace bailar, el que te hace que te muevas en la pista. Para mí es un cambio porque los sonidos no son los mismos. Es como una reinvención del artista que más triunfo en esa época al principio con Quítate el Top, Dale o Así soy yo. Vamos a intentar llegar al Kiko Rivera más movido, mas ‘fiestero’.

Presidente de la Kings League

Además de su faceta como cantante, Kiko Rivera se ha convertido también en creador de contenido en las redes sociales. El sevillano juega en directo al FIFA y al Fornite, lo que le ha permitido penetrar en un gremio que está cada vez más en auge. Tanto que incluso amagó con comprar un equipo de la Kings League, aunque finalmente se echó atrás.

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Estuviste cerca de convertirte en el primer jeque de la Kings League.

Yo cogí y dije que si había opción de comprar un club yo estaría encantado de hacerme con uno. También lo dije sin pensar, porque si te fijas... lo he visto estos días en Barcelona con Spursito. Las 24 horas del día están pensando en la Kings League. Que si contrato de una cosa, que si entrenador, que si entrenamientos, que si las marcas. Ostras, dejar toda tu vida, en este caso mi profesión y todo lo que vengo arrastrando desde que me dio el ictus hasta ahora para preparar la música nueva, por algo así... tendría que tomar una decisión importante ahí.

¿Tenías pensados algunos jugadores para ser los números 12 y 13 de tu plantilla?

Puedo dar ideas eh, me las pueden quitar en un futuro. Yo tenía dos en mente. Una, se lo iba a preguntar a Andrés Palop, que tenemos amistad. Y la otra que hubiera intentado es a Joaquín, que se retira este año y yo creo que encaja perfectamente en el mundo de la Kings League.

¿Te da igual, en este caso, que sea bético?

Por supuesto. Tu piensa que yo tengo muchísimos amigos y conocidos del Betis y, para mí, eso no es un impedimento. Yo soy sevillista y no quiero que gane el Betis, pero hasta un límite. El límite del respeto para mí tiene una línea, y cuando termina el mío empieza el derecho del otro. Entonces, está bien que nos piquemos de manera sana porque si no, no sería tan divertido, pero hay que respetar tanto en el fútbol como en la música como en la vida cotidiana.

¿Qué tal tu contacto con Piqué?

Me cayó muy bien. No había tenido el placer de conocerlo. Como futbolista me habré cagado en sus muelas 700 millones de veces, porque a veces era un poco así. Pero luego en persona cuando tuve la opción de hablar con él fue muy simpático, amable. Para mí es suficiente para tenerlo como alguien respetable. Fue muy educado.

El Sevilla, su otra pasión

Después de un año lleno de turbulencias en lo deportivo y en lo extradeportivo, el Sevilla vuelve a optar a un título europeo. En su séptima final, el club de Nervión tratará de lograr su séptima Europa League. Un registro sin precedentes que convierte a los del Ramón Sánchez Pizjuán en los reyes de una competición en la que la gloria les queda a tan solo un paso.

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El Sevilla, a un pasito de la séptima.

¡Ay!, no me hables de la séptima que lo estoy pasando fatal. Vaya temporadita. Después de la temporada que ha dado el Sevilla qué quieres que te diga, tenemos que ganar sí o sí, no tenemos otra opción. Si no, es una cagada de temporada. Y enfrente Mourinho.

Pero con Mendilibar en el banquillo.

Para mí ha hecho una cosa increíble. Yo pensaba que esto estaba perdido, viniera Mendilibar o el Espíritu Santo. Yo estaba jodido, porque hace pocas semanas estábamos luchando por no descender. Hoy estamos jugando una final de la Europa League. Mendilibar lo que ha hecho ha sido ordenar un poco todo lo que habían desordenado Lopetegui y sobre todo Sampaoli.

¿Te gustaría que renovara?

Creo que no va a renovar, pero a mí me gustaría que lo hiciese, aunque también entiendo que no lo haga. Si el Sevilla gana la Europa League y Mendilibar se va, se va como un dios y va a quedar como un dios siempre, porque de estar en descenso nos habría llevado a ganar una Europa League. Si se queda, y de repente pasa lo que nos suele pasar y pegamos un bajón, pues nadie se va a acordar de que ha ganado la Europa League porque nadie se ha acordado de que la ganó Lopetegui. Creo que no va a firmar, pero si lo hace encantado de la vida, porque es un tío que lo está haciendo extremadamente bien.

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En esa decisión tendrá algo que decir Monchi. Me consta que tienes una anécdota graciosa con él de la primera UEFA.

Fue una historia que pasó en Eindhoven, cuando jugamos contra el Middlesbrough. Aquel equipo con Luis Fabiano, Kanouté, Navas, Puerta... Yo me quedé en la fiesta con los jugadores y mi hotel estaba lejísimos de ese. Al final me quedé ahí. Y cuando se fueron todos a dormir me quedé sin cama y sin habitación. Entonces fui randeando por el hotel a ver qué puertas había abierta. Me encontré una en la que las luces del baño estaban encendidas y no había nadie en la cama, así que me metí. Me quedé dormido en la cama de Monchi. Cuando me desperté por la mañana estaban todos los jugadores coreando mi nombre. Para mí era un sueño. Recuerdo a Saviola, que me daba abrazos y me besaba la calva, el cabrón.

Hablábamos antes de colaboraciones. ¿Quizá un himno del Sevilla con El Arrebato?

Ojalá, sería la bomba. He disfrutado muchísimo con el Sevilla, me lo he pasado muy bien y ojalá algún día hacerle algo. No para quitar el de El Arrebato, porque eso no se puede quitar, pero para que tengan otras opciones. Los tiempos cambian y todo se moderniza un poco.

Tu relación con el fútbol va más allá del Sevilla. También fuiste canterano del Real Madrid.

No sé si se puede considerar jugar en el Madrid, pero para mí era un sueño. Yo era muy pequeño, era un mindundi. No se me daba mal jugar al fútbol, pero no tenía las cualidades necesarias para ser un futbolista profesional. Entre otras, que no estudiaba. ¿Jugaba al fútbol? Pues claro. ¿Tenía enchufe? También.

¿Enchufe?

Ramón Mendoza era el presidente y mi madre tendría algún tipo de contacto y le pediría que me metiera ahí. Lo que haría cualquier madre o padre por su hijo. Me hicieron la prueba, estuve no sé si fue una temporada y en la siguiente ya estaba fuera. Ya se veía, incluso yo ya veía, que para el fútbol no. No se puede valer para todo, aunque mira Julio Iglesias.

Uno de los temas más de actualidad en el fútbol son los insultos que recibe Vinicius. ¿Qué te parecen?

Es un tema muy delicado. Lo comento con mis amigos porque ves el fútbol con tus amigos, las noticias de Twitch. Llegamos a una conclusión, aunque no se si es la correcta o no. Bajo ningún concepto se puede permitir lo que le dicen. No hay excusa ninguna, no vale. Pero claro, también hay que entender que él es provocador. Pero vuelvo a repetir, no es excusa para decirle todas esas cosas que se le dicen. Hoy un amigo mío me decía: ‘Es que a lo mejor si Vinicius bajara una marcha más, la gente bajaría una marcha’. Yo creo que la gente no bajaría una marcha y creo que él disfruta con eso, porque le gusta jugar con el ambiente calentito hasta el momento en el que le dicen las barbaridades que dicen. Le gusta jugar con el ambiente calentito, pero no mola nada la situación.

La televisión y Torrente

Durante una etapa de su vida, Kiko Rivera fue protagonista de numerosos programas de televisión. No solo en Telecinco, sino que también participó en Sé lo que hicisteis o la parodia que le hicieron en Muchachada Nui. Supervivientes, Gran Hermano o Ven a cenar conmigo también contaron con su presencia. Sin embargo, ahora, sin renegar de ese mundo, admite que prefiere centrarse en su carrera musical.

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Has sido uno de los famosos con los que ha contado Santiago Segura para participar en Torrente.

Es una de las cosas más impresionantes que me han pasado en la vida. Yo he sido fanático de Torrente desde la primera película. Me parece un personaje cojonudo, aunque hoy en día no se podría hacer porque la gente no entendería ese humor que antes sí se captaba y te hacía pasar un buen rato. Me alegro mucho de que Santiago Segura contase conmigo para hacer de Rinrin, ese personaje que todo el mundo ha podido ver. Fueron unos meses complicados, porque había que ensayar muchísimo y prepararse un montón el personaje. Al final lo conseguí. Lo hice de la mejor manera que pude y para mí lo tengo apuntado en mayúsculas en mi currículo.

¿Cómo recuerdas tus experiencias en Supervivientes o Gran Hermano?

En Gran Hermano he estado varias veces, pero realmente con la que me quedo es con la última, que fui con mi mujer, que quedé segundo. Tanto Supervivientes como Gran Hermano han formado parte de mi vida, no reniego de ello en absoluto, pero a día de hoy es igual que el Kiko Rivera televisivo. He ido a infinidad de programas, he ganado dinero por ir. Pero ahora intento no remover al Kiko Rivera personaje y sí realzar al artista. Y de la única manera que se puede hacer es olvidándote de una cosa y centrándote en la otra. Sacando canciones que a la gente le molen, sembrando semillitas y haciendo lo que más me gusta hacer: la música.