Josie revela la enfermedad que le ha alejado de la televisión: “Casi me muero”

La fama de los particulares vestidos de Cristina Pedroche en Nochevieja tuvo como costurero del éxito a Josie, el estilista y televisivo que se ha ganado a las cámaras con sus recurrentes apariciones en platós de muy diferente categoría. En la actualidad es colaborador de Zapeando, pero no se quedan ahí sus contribuciones en formatos. Sus papeles en MasterChef Celebrity y Tu cara me suena le han catapultado a la primera escena mediática. Por ello, cuando dejó de aparecer durante meses, todo el mundo se preguntaba lo mismo. ‘¿Dónde está Josie?’ La respuesta la ha dado él mismo en el programa en su formato habitual de La Sexta.

Había retornado para sorprender a Cristina Pedroche, quien se encuentra aterrizando en la televisión tras su reciente maternidad. Junto a ella desveló los primeros detalles del vestido que llevará en las Campanadas, y cuando surgió la duda que todo el mundo se ha cuestionado, Josie no tuvo reparo en explicar qué le apartó de los platós. “Colapsé. Se estaba emitiendo un programa que habíamos hecho con mucho cariño y tampoco podía decir estoy malo, pero es que acabé liquidado”, explicó. El resto del diagnóstico pone los pelos de punta.

“Acabé fatal, pesaba 59 kilos”

Y entonces explicó el complejo revés en su organismo que le había alejado de la televisión. “Me fui a la clínica y me han resucitado. Tuve una insuficiencia suprarrenal”, desveló. Su estado durante esta etapa ha sido nefasto, según cuenta. “Acabé fatal. Pesaba 59 kilos”, dijo antes de dar un titular contundente: “casi me muero”. Y a este respecto aseguró que agradece a “la ciencia y la medicina” por haberle “salvado la vida”. Para tranquilizar a sus compañeros insistió en que ahora está mucho mejor. “He recuperado hasta mi pelo, he resucitado hasta capilarmente, lo necesitaba, necesitaba parar un poco”, alisó el tono entre risas.

Concretamente, la insuficiencia que ha sufrido Josie se debe a la incapacidad de las glándulas suprarrenales de producir la cantidad suficiente de ciertas hormonas que resultan indispensables para regular algunas funciones del cuerpo. Es el caso, por ejemplo, de la metabolización de las proteínas, de las grasas y de los azúcares. La insuficiencia genera, a fin de cuentas, unas consecuencias en el cuerpo que resultan muy desagradables a quien las padece. Entre estos síntomas se podrían encontrar náuseas, vómitos, diarreas y debilidad; aunque, si empeora, podría llegar a caer la presión arterial, las articulaciones generarían un gran dolor y, además, todo esto provocaría una terrible pérdida de peso.