John Battsek, productor de ‘Beckham’: “Subestimé su capacidad para contar su historia”

John Saul Adrian Battsek (1963) es uno de los productores del documental de David Beckham que se estrena en Netflix. Un proyecto que ke conquistó desde el minuto 1 y en el que se ha implicado y disfrutado a partes iguales: “Pensé que sería estupendo abordar la historia de David y hacer algo realmente especial. Que la gente lo viera y saliera diciendo: “Dios, tienes que ir a ver ese documental sobre David Beckham, es increíble”.

-¿Cómo surgió Beckham?

-Había oído hablar de una serie sobre David Beckham. Fisher (Stevens, el director) es amigo mío, trabajamos juntos hace mucho tiempo en una película llamada Once in a Lifetime sobre el Cosmos de Nueva York. Fisher me llamó para decirme, en primer lugar, “¿qué te parece si hago una película sobre David Beckham?” Y mi respuesta inmediata fue que debería producirla. A partir de ahí, me presentaron a Nicola Howson, que dirige Studio 99, y tuvimos probablemente un par de reuniones en las que estuve a punto de rogarle que me permitiera producirla. Y así fue como me convertí en su compañero de producción.

-¿Por qué tenías tantas ganas de participar?

-Soy un gran aficionado al deporte y al fútbol. Produje la película sobre Alex Ferguson Sir Alex Ferguson: Never Give In, que fue una experiencia increíble, aunque no soy seguidor del Manchester United. David Beckham, junto con Pelé y probablemente ahora Leo Messi, es uno de los futbolistas más famosos de todos los tiempos. Tuvo una carrera increíble, llena de altibajos, y sólo por la naturaleza de su historia pensé que si podía participar, quizá podría ayudar a que fuera algo que la gente no esperara. Porque la mayoría de las veces, cuando personas tan famosas y con tanto éxito como David hacen documentales, acaban estando bien, pero no hay nada que no se pueda esperar. Buen fútbol y todo eso, pero ya sabes, no aprendí nada que no supiera antes. Pensé que sería estupendo abordar la historia de David y hacer algo realmente especial. Que la gente lo viera y saliera diciendo: “Dios, tienes que ir a ver ese documental sobre David Beckham, es increíble”.

-¿Cómo se decidió por un enfoque y una metodología?

-Bueno, en primer lugar, se necesita un tema y un equipo en torno al tema que sean lo suficientemente audaces como para comprometerse con ese concepto del que acabo de hablar. Por el mérito de David, y por el enorme mérito de Nicola, lo fueron absolutamente. Fuimos muy claros desde el principio: “Si queréis que hagamos esto, este es el camino que vamos a seguir”.

Ampliar

-¿Cómo le explicaste a David tu ambición?

-Lo que dijimos fue, en primer lugar, que no nos interesaba un artículo de prensa. No nos interesaba algo que sólo hablara de lo gran futbolista que eres. Sobre todo, queremos profundizar y entender qué te hizo vibrar, qué te hace vibrar, qué te llevó a hacer las cosas que hiciste. No queremos barreras; queremos poder ir a todas partes y a todos los temas que consideremos necesarios. Y vamos a ser increíblemente minuciosos: no vamos a dejar piedra sin remover. Así que las primeras conversaciones giraron en torno a: “David, cómo podemos ponerte en un lugar en el que te sientas lo suficientemente relajado como para abrirte de verdad? Nicola Howson hizo un gran trabajo para conseguirlo, y luego un gran trabajo durante todo el proceso para mantener ese estado con David con nosotros, para que nunca se resistiera a cualquier pregunta que se le planteara.

-La grabación se le ve muy relajado, muy espontáneo...

-Eso vino de Stevens Fisher. En esta grabación aprovechó sus puntos fuertes de la mejor manera posible, porque le permitió ser Fisher, que es increíblemente encantador y gracioso. Además, lo mejor de Fisher es que sabe lo que no sabe, que es una gran parte de la historia. Te dirá que antes de esto no era aficionado al fútbol. No sabía nada. Nada. Ni siquiera puede pronunciar correctamente los nombres de nadie. Pero aportó un encanto durante toda la grabación. Queríamos que estuviera suelto, que se sintiera relajado y que pareciera que David estaba dando la bienvenida a Fisher. Es como si te sumergieras en algo que no es lo que esperas. Y eso permitió que todo tuviera ese aire relajado tan bonito: Fisher lo hizo de forma natural.

-Fisher insiste en que esto no es una historia de fútbol...

-No lo es, y eso es vital: tienes que contarlo de una manera que haga a este hombre increíblemente interesante para la gente que no tiene ningún interés en el fútbol. Iba a decir que, en algunos aspectos, el fútbol era lo menos interesante de todo, pero no es cierto: el fútbol de Beckham era increíble y queríamos recordárselo a la gente, porque por alguna razón no es un futbolista al que la gente recuerde como un loco de talento, como Pelé o Messi, pero tenía un talento increíble, y sacó más partido del que tenía. Contar esa historia desde el punto de vista futbolístico fue realmente emocionante. Pero luego descubres que parte de lo que le convirtió en un gran futbolista son las cosas con las que otras personas pueden identificarse, como sus experiencias de niño, su relación con su padre, todas sus otras relaciones y especialmente su relación con Sir Alex Ferguson. Todo eso hace que la historia sea mucho más que una simple historia de fútbol, pero también informa sobre la historia del fútbol.

-Es increíble la gran cantidad de gente que aparece en el documental...

-Es una prueba de que la gente quiere a David. Le tienen un gran respeto. Creen que fue un futbolista increíble, como lo fue, y un compañero de equipo increíble, y simplemente un gran tipo. El hecho es que las relaciones de David con todas estas personas, y su reputación, son la razón por la que todos ellos querían estar en la serie.

-¿Qué pensabas de David Beckham antes de comenzar el proyecto?

-Pensé que probablemente su capacidad para comunicarse de forma emocional era bastante limitada. Creo que me di cuenta de que era un buen tipo, pero subestimé considerablemente su capacidad para contar su historia y ser sincero con ella. Si he de ser sincero, pensaba lo mismo de Victoria, y también me equivoqué completamente con ella. No me imaginaba que sería tan poderosa e impresionante y (de nuevo) valiente, honesta y emotiva. Pero desde lejos, no creía que David la tuviera. Y en realidad, como se ve en la serie, si piensas en cómo se convirtió en el centro de atención de tantas cosas en la cultura popular por literalmente todo lo que hacía, desde su pelo, hasta el pareo, los tatuajes y las gafas; y cómo se subió a la ola y siguió subiéndose a la ola y la controlaba... fue extraordinario que consiguiera hacer eso y mantenerse cuerdo. Y seguir siendo brillante en el campo de fútbol.

-¿Qué respondes cuando te preguntan cómo es David Beckham?

-Es que es un tipo muy, muy majo. Muy decente, muy vulnerable, muy sensible, muy generoso y agradable. Dice al final del episodio 2 que le gusta ser amado. Le gusta gustarle a la gente. Dijo eso porque la gente decía odiarlo tan violentamente como decían odiarlo. Pero creo que es fundamentalmente un tipo muy, muy agradable.

¿Cómo encaja esta serie en lo que intentas hacer como productor de documentales?

Es una pregunta delicada, porque si respondo me arriesgo a que me den una paliza, pero en muchos aspectos creo que es lo mejor que he hecho nunca en ese ámbito. Me encanta todo, pero hay momentos en esta serie que son algunos de los mejores trabajos documentales que he visto en mucho tiempo. Así, por ejemplo, la secuencia en el episodio tres, donde Sir Alex y David no se comunican entre sí mientras rompen, creo que es una de las cosas más poderosas que he presenciado. Porque si realmente lo ves, y realmente ves lo que está pasando allí es absolutamente devastador. David está hablando de lo que rompió su corazón, permanentemente, y está tan roto hoy como lo estaba entonces. Se despliega frente a tus ojos. Y si realmente lo ves, es extraordinario.