Joana Sanz vuelve a Instagram: “La diosa ha vuelto”

Pocas horas de declarar como testigo en el juicio contra Dani Alves por la supuesta violación que cometió en la noche del 30 al 31 de diciembre contra una joven de 23 años, Joana Sanz desapareció de las redes sociales. La todavía mujer del futbolista, pues no existe una petición oficial de divorcio tal y como ella misma confirmó en su declaración, intentó alejarse así del ruido mediático alrededor del caso.

Apenas unos días después, la modelo tinerfeña reaparece en su cuenta de Instagram con un mensaje claro. En sus publicaciones, Joana Sanz ha compartido dos fotografías escribiendo “ella ha vuelto”. Un mensaje no especialmente significativo en comparación con el que ha reflejado en sus historias: “La diosa ha vuelto”.

“Trabajar alrededor del mundo es mi “crédito”. Besitos desde Sudáfrica”, ha publicado minutos más tarde desde una playa en el país africano junto con un emoticono de una cara mandando callar. Un mensaje que parece ir dirigido a todos los usuarios que le han criticado en los últimos días con motivo de su testificación en el juicio.

Las palabras de Joana Sanz

La modelo canaria explica que su decisión de regresar a las redes sociales no es otra que debido “a la constante lluvia de informaciones que me han llevado a tener que volver a pronunciarme”. “Es muy grave que se me acuse de falso testimonio y estoy tomando acciones legales contra los medios que lo han iniciado y se han hecho eco de dicha acusación”, escribe.

“¡Cuánto cinismo hay en este país! ¿Libertad de expresión? ¿Dónde? Todos seguís el patrón de lo políticamente correcto por miedo de decir lo que realmente pensáis y que se os tiren encima. Añadiría un par de cositas más, pero no me vale la pena el desgaste”, concluye en su comunicado.

Así fue su declaración

Pese a que cuando la causa estaba en fase de instrucción Sanz apuntó que estaba con su madre en Canarias en la noche de los hechos, Joana afirmó en sede judicial que había llegado a casa pocas horas antes de que Alves llegara a la vivienda. Según su testimonio, su marido llegó oliendo a alcohol hasta el punto de que se chocó con los muebles y cayó rendido sobre la cama. “En los WhatsApp le pregunté si iba a venir a cenar y me dijo que no. Más tarde, no lo recuerdo. El último mensaje fue como a las once de la noche”, explicó antes de aclarar que los trámites de divorcio todavía no están en marcha. “Lo paró porque le da pena, no porque quiera volver. Nunca han vuelto a estar juntos”, explicó Laura Fa en su pódcast ‘Mamarazzis’.