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Joana Sanz se pronuncia sobre si visitará a Alves en la cárcel: “Voy fluyendo”

La mujer del exfutbolista ha reconocido no saber cuándo será su siguiente visita a su marido en la prisión de ‘Brians 2′. Mientras tanto, Alves endurece su defensa.

Joana Sanz se pronuncia sobre si visitará a Alves en la cárcel: “Voy fluyendo”

Joana Sanz sigue intentando volver a asentar su vida después del encarcelamiento de su marido por una presunta agresión sexual a una joven de 23 años. La modelo, que también sufrió la pérdida de su madre a principios de año, se ha refugiado en el trabajo para salir del bucle en el que estaba inmersa.

De algunas de sus aventuras ha ido dejando impronta en su cuenta de Instagram. La última allá por Emiratos Árabes Unidos, donde disfrutó de la fiesta de inauguración de la marca española Sesderma. De hecho, en uno de los eventos en los que participó en su viaje a los países del Golfo reconoció que estaba pasando por una “situación complicada”.

En su regreso a España, las cámaras han vuelto a perseguir cada paso de la tinerfeña. “Sois como los Gremlins, os echan agua y salen un montón. Me voy a comer la farola”, bromeó Sanz, que ha tenido una relación de altibajos con la prensa, a la que ha criticado en varias ocasiones por esperarla a la puerta de su casa y llamar por su telefonillo.

En esa intervención, Joana ha dejado caer que no sabe si se producirá un reencuentro próximo con Dani Alves en la prisión de Brians 2. No lo sé, yo voy fluyendo”, ha manifestado en el último de todos los mensajes que ha mandado desde la calle con dirección hacia su marido.

La defensa de Alves, cada vez más dura

Mientras tanto, Dani Alves sigue en prisión provisional a expensas de que salga el juicio. La Audiencia de Barcelona le ha denegado su excarcelamiento en dos ocasiones, por lo que la defensa ha pasado a un siguiente plano y está poniendo todo su empeño en una nueva estrategia basada en desacreditar a la víctima.

Para ello, su abogado, Cristóbal Martell, ha propuesto colocar un perito para que interviniera en una prueba psicológica que la jueza había demandado y, además, grabar esa prueba. Mientras tanto, la víctima “está recibiendo apoyo psicológico a través de una entidad pública especializada en el tratamiento de víctimas de violencia”, tal y como comunicó su letrada.