Habla la agente que detuvo a Rosario Porto por el ‘Caso Asunta’: “Pronto tuvimos claro que era culpable”

El asesinato de Asunta Yong Fang en 2013 a manos de sus padres adoptivos, Alfonso Basterra y Rosario Porto, vuelve a estar de actualidad tras el estreno de ‘El caso Asunta’ en Netflix. Una ficción bajo el sello de Bambú Producciones protagonizada por Tristán Ulloa y Candela Peña que narra los macabros hechos que tuvieron lugar en Santiago de Compostela y que conmocionaron a todos. Un crimen por el que los culpables recibieron una pena de dieciocho años de prisión cada uno, pero a la que la madre de la menor puso fin quitándose la vida en 2020 en la cárcel de Brieva, Ávila.

El éxito de la serie de Netflix, producida por Ramón Campos, ha devuelto el caso a los medios de comunicación que durante estos días están ofreciendo interesantes testimonios de personas que trataron tanto con Rosario Porto como con Alfonso Basterra, así como algunos de los implicados en la investigación. ¿La última en hablar? Begoña Rodríguez, la agente judicial de la Guardia Civil encargada de detener a la madre de Asunta, y que en 2017 también participó en el documental ‘Operación Nenúfar’ que está disponible en la misma plataforma.

En una entrevista en ‘Y ahora Sonsoles’, Begoña Rodríguez recuerda la investigación, además de revelar algunas de sus conversaciones con la gallega. “En un equipo de homicidios, ella era la única mujer por eso Rosario se abre con ella de una forma extraordinaria”, comienza diciendo uno de los colaboradores del programa de Antena 3.

El relato de Begoña Rodríguez

“Vi a Rosario Porto por primera vez en su casa, el primer día que empezamos a trabajar (...) Estaba afectada. Había una pareja amiga de ella, Alfonso y la madrina de Asunta. Parecía que estaban disgustados”, recuerda la agente de la Guardia Civil. “A los compañeros que asistieron al levantamiento del cadáver y a mí, siempre nos pareció curioso cómo estaba colocada la víctima. Suponíamos que podía ser alguien cercano a la niña”, añade.

Begoña Rodríguez admite que, cuando obtuvieron más datos, “no tuvimos ninguna duda, policialmente hablando, a pesar de que ella nos dijera que nos estábamos equivocando”. Tras la detención, Rosario Porto le confesó a la agente que tenía una relación con un hombre que no era Alfonso Basterra: “Ella tenía relación con un señor con el que estaba muy ilusionada. Hablaba mucho de eso porque le hacía sentirse bien (...) Rosario no es que no mostrase sorpresa, dijo que nos estábamos equivocando, pero tampoco... Tuvo una reacción bastante calmada’'.

“Alfonso Basterra le solucionaba la vida, de llevar a la niña a todas las actividades, hacer la comida, comprarle, gestionar todos los asuntos domésticos...”, explica también Begoña Rodríguez.

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