Un juez del Supremo dice ‘no’ a la liberación de Robinho

El exfutbolista brasileño del Real Madrid y Milan, entre otros muchos equipos, Robinho, seguirá en la cárcel de São Paulo después de que un juez del Tribunal Supremo de Brasil haya votado en contra del ‘habeas corpus’ que había solicitado la defensa del condenado. Robinho lleva desde el mes de marzo en la cárcel por una violación colectiva en 2013.

Luis Fux, relator del caso, justificó su negativa bajo el pretexto de que “no se vislumbra ninguna violación de las normas constitucionales”. La representación del exfutbolista alega que no hay garantías de que la condena se pueda cumplir en Brasil habiéndose producido los hechos en Italia y que, por ende, el jugador tendría que ser liberado hasta que la Corte Suprema se pronuncie definitivamente al respecto.

Después del ‘no’ del magistrado, el juicio se suspendió inmediatamente y de forma indefinida, por lo que Robinho permanecerá entre rejas hasta que la cuestión se vuelva a abrir. Además, el argumento de sus abogados recalca que todavía pueden poner recursos contra la sentencia, por lo que la condena contra su cliente no es firme todavía.

Condenado en Italia y sin extradición posible

El 19 de enero de 2022, Robinho fue condenado en Italia a nueve años de cárcel por una violación grupal a una mujer albanesa. Cuatro personas fueron consideradas culpables del delito y, además, el ente judicial recalcó en su sentencia que el brasileño actuó “con especial recelo” hacia una víctima a la que “obligaron a beber hasta el punto de quedar inconsciente y ser incapaz de resistirse”.

El brasileño huyó de tierras italianas hacia su país natal para refugiarse, pues Brasil no tiene convenio de extradición con Italia. No obstante, tras un tiempo en el que el caso no estuvo claro, el Tribunal Superior de Justicia de Brasil, tras recibir la petición de sus homólogos transalpinos, votó a favor de “homologar la sentencia”.

“Robinho ya ha sido condenado en Italia y debería haber cumplido su condena aquí. Será juzgado este mes. Espero que pague el precio de su irresponsabilidad (...) Todas las personas que cometan el delito de violación deben ir a prisión. Él tuvo más suerte que el 99% de los jóvenes brasileños, ganó mucho dinero y se hizo muy famoso. No necesitaba eso”, opinó al respecto del caso el presidente brasileño, Lula da Silva.

Desde entonces, Robinho está recluido en una de las cárceles más peligrosas del mundo: la de Tremembé. “Hay celdas que tienen seis camas de cemento para sesenta hombres y donde ni siquiera había espacio para que todos pudieran tumbarse en el suelo”, expone un informe de Human Rights Watch. Además, muchos presos están enfermos y las bandas organizadas controlan todo lo que sucede en el interior de las estancias.

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