Oriol Tres, ‘TrescoBall’: de jugar en el Barcelona contra Doncic, a crear Ballers, su propio reality show de baloncesto callejero

Oriol Tres (Sabadell, 27 años), popularmente conocido como Tresco, ha ‘prestado’ su vida al baloncesto desde pequeño. Jugó en las categorías inferiores del Barcelona, puso rumbo a Estados Unidos después, y volvió a España, donde se convirtió en toda una referencia entre los creadores de contenido sobre baloncesto de la mano de su canal, ‘Tresco Ball’.

Un canal en el que ha creado algo inimaginable, Ballers, un ‘reality show’ que trata de este deporte, y que le ha llevado a recorrer España entera. Un proyecto del que habla en una entrevista concedida a AS.

- ¿Cómo surgió la idea de ponerlo en marcha?

Para entender el origen de Ballers, hay que remontarse a mi trayectoria previa: llevo más de seis años creando contenido sobre baloncesto en YouTube. Con el tiempo, uno va evolucionando y madurando, y sentí la necesidad de ir más allá de los simples vídeos. Quería construir algo que trascendiera mi figura personal y que sirviera como plataforma para que el baloncesto callejero —el más puro y auténtico— tuviera su propio espacio de expresión.

- ¿Qué elementos hacen que Ballers sea un proyecto diferencial dentro del panorama del baloncesto?

Uno de los aspectos clave es que no nos limitamos a lo que ocurre en la pista. Cada parada incluye también una gala televisiva en la que los jugadores participan en debates, generando una narrativa más cercana al formato de un reality show de baloncesto. Me gusta compararlo con programas como Operación Triunfo, donde los participantes no solo compiten, sino que también conectan con la audiencia a través de sus personalidades, rivalidades y opiniones. Eso crea una comunidad y una implicación emocional que va más allá del resultado deportivo.

- ¿Por qué decidiste centrarte en el baloncesto callejero en lugar de apostar por un formato más tradicional como el 5 contra 5?

Analicé dónde podíamos aportar algo realmente distinto. El baloncesto profesional —la ACB, la Euroliga, la propia NBA— ya tiene una estructura muy consolidada. Nosotros queríamos ofrecer un producto que no se pareciera a eso, que tuviera su propia identidad. Por eso optamos por un formato de 4 contra 4 a pista completa, con reglas propias: los partidos no se juegan por tiempo, sino a 21 puntos, y en caso de empate se resuelven con un uno contra uno. Todo está pensado para fomentar la creatividad y dar espacio al talento más libre y callejero.

- ¿Crees que los jugadores que participan en Ballers podrían dar el salto al baloncesto profesional o al circuito oficial de 3x3?

Yo creo que no, yo creo que el baloncesto callejero tiene sus propias normas y son estilos de juego totalmente diferentes, igual que un jugador de fútbol callejero puede ser muy muy bueno jugando en la calle, pero no tiene esa transferencia al fútbol más puro y más real pues un poco aquí pasa lo mismo, es decir tenemos casos de jugadores como el propio Herson, que es la gran estrella de nuestra serie, es un jugador que, si no es el mejor es de los mejores del país, pero después cuando lo ponemos en una cancha tradicional le cuesta mucho más.

- Al profesionalizarlo se borraría esa huella...

Es que poco a poco va desapareciendo esa magia y pasa todo a ser mucho más analítico. Es por eso que nosotros en Ballers, quieras o no, porque si analizas bien lo que está pasando en la serie, no se basa en el ganar o perder en cada uno de los partidos, porque realmente la competición está entre los seis jugadores, entre los propios seis jugadores solo hay un ganador entonces eso es lo que hace que la competición como tal entre nosotros...

Ganar o perder no es el gran objetivo que tiene la serie, el objetivo es analizar y ver cómo se desarrollan los seis jugadores en cada una de las paradas. Por supuesto que queremos ganar y siempre hay el factor y siempre vamos al 100%. Pero para que me entiendas que después no se desarrollan tantas tácticas o no vamos tanto al detalle.

Es mucho más dejar fluir, dejar que la gente sea natural y eso es lo que creo que nos ha dado esa autenticidad a la hora de que el productor con los pasiones que hemos avanzado no haya perdido su esencia.

- Estáis recorriendo toda España con el proyecto. ¿Qué ciudad os ha sorprendido más por su acogida o por la calidad de sus canchas?

Tenemos que decir que cuando empecé este proyecto, en mi vida no me hubiera imaginado que podíamos llenar las canchas al más puro estilo de Estados Unidos al final aquí todos estaremos de acuerdo que el fútbol es el deporte rey y claro, y el baloncesto es el segundo deporte, pero yo por ejemplo hay ciudades como Málaga por ejemplo que ha estado en los dos años, y el recibimiento que ha tenido... o el propio Madrid o Bilbao...

Realmente te sorprende que resuene que un producto de jugadores no profesionales si está iniciado por un youtuber, sin despreciar mi trabajo, pero que tenga ese recibimiento y esa llegada a una ciudad... y la verdad que es algo que para mí es de los que más orgullosos soy. Hemos llenado canchas que yo no me hubiera imaginado que sería una posibilidad aquí en este país.

- Llegaste incluso a enfrentarte a Luka Doncic. ¿Qué significaba eso para ti?

Sí, para mí en ese momento, cuando yo estaba compitiendo en las categorías inferiores del Barça, pues lo tomamos como un rival muy duro. Estuvimos muchas veces compitiendo contra él. Es verdad que con el tiempo y con la perspectiva, pues jamás, nunca nadie se podía haber imaginado que aunque fuera el mejor, el que despuntara tanto como lo hacía ya desde bien pequeño, podría llegar a la magnitud del jugador que es a día de hoy.

Y yo simplemente desde la distancia, siento como un orgullo muy grande de haber compartido pista con él y de verle ahora brillar con los mejores del mundo. Y la verdad que chulo, que es una experiencia bonita y que me quedo para siempre.

- ¿Cómo fue precisamente esa transición tuya de ser jugador a la de creador de contenido?

Cuando dejó el baloncesto bastante joven, porque dejo de jugar a los 20 años, sabía que el baloncesto era el amor de mi vida y que de una forma u otra, aunque no jugara, seguía vinculado.

Y, durante el siguiente año, en 2018, cuando tenía 21 años, es cuando me surgió la oportunidad de yo veía que en el mundo del fútbol, el contenido de entretenimiento de fútbol era muy chulo, triunfaba mucho, y yo me sentí con la capacidad para ello, porque siempre había hecho vídeos por gusto, porque los disfrutaba, íbamos a un viaje y me gustaba hacer un vídeo y dije, mira, creo que tengo las capacidades tanto de juego, por mi nivel que tenía en ese momento, como de mis historias que he vivido en este mundo, con de Luka [Doncic], de Estados Unidos, del Barça... que yo creo que interesaba al público, y me lanzo un poco a la piscina sin saber cómo acabaría, pero sí intentando ser muy exigente, organizado, intentando hacer lo que al público le gustaba.

Y la verdad que los últimos cinco meses, pues de febrero del 2018 hasta mayo, pues no triunfé mucho. Pero después fue un poquito un dominó, ¿no? De que un vídeo te funciona y de ahí empiezan a funcionar otros, y hasta hoy.

Ha sido un camino muy bonito, muy diferente. Y yo simplemente recuerdo cada una de las etapas con mucho cariño, desde que era jugador hasta después en la transición, y pues, por supuesto, ahora con todo el tema de crear contenido.

- Has podido conocer incluso a jugadores como Giannis Antetokounmpo. ¿Cuál es, por ejemplo, para ti, la mejor experiencia que has vivido como creador de contenido?

Es muy difícil quedarme con una porque son muy diferentes. Te puedo enseñar algunas y después te puedo decir cuál me ha llenado más mi vida personal. Yo desde que fui campeón del torneo de Ibai de pádel, que fue la primera vez que me exponía a algo tan grande, que llevaba tanta gente... Me cambió mucho la vida... Después, formar parte del equipo de streamers de la Selección española que fue campeona del mundo de fútbol en Sevilla, en el Benito Villamarín...

Pero si me tengo que quedar con una no me puedo ir de mi sector y creo que te diría que la primera parada que hacemos en Madrid, de Ballers, en la primera temporada. Esa es la primera vez que siento que el proyecto ha cogido un gran volumen que superaba con creces todo lo que yo algún día había soñado. Aparte fue muy bien y fue muy divertido el partido y cuando la gente hace una invasión de campo... yo me veo la cantidad de gente que está ahí por el proyecto, de quienes trabajan conmigo como YouPlanet... Esa sensación, aunque las siguientes dos temporadas las hemos repetido, esa forma de llenar los campos, creo que la primera siempre es muy especial.

Yo ahí me doy cuenta de que a veces puedes ser consciente de lo que es un millón de visualizaciones en YouTube, pero cuando ves a la gente gritando y disfrutando y dándonos una vida que un día imaginaste en tu habitación, creo que es una sensación que difícilmente es superable en cualquier otra experiencia que haya vivido.

- Debe ser una grandísima sensación poder ver cómo una idea como la que tuviste acaba saliendo bien...

Sí, yo me acuerdo mucho de mis inicios en YouTube, cuando hablaba con gente y me decían: ‘No, es que jamás funcionará el entretenimiento de baloncesto aquí, porque no somos Estados Unidos, es decir, funciona el fútbol porque el fútbol es lo grande aquí’.

Yo me negaba a creer que aquí no había suficientemente gente para generar un público y una audiencia que molara así como lo hemos hecho. Entonces, cuando acaba funcionando de la forma que lo ha hecho, con una comunidad muy muy fuerte, por supuesto la segunda más fuerte del mundo, y es algo que no se ha visto en otro país, aparte de Estados Unidos, estoy muy orgulloso, no por mí, sino por toda la gente que forma la comunidad, las familias que vienen a apoyar los proyectos, todos los creadores pequeños que han nacido a través de Ballers...

Yo siempre digo eso, que para mí mi legado va a ser ese, va a ser Ballers y un poco como Ballers ha afectado a la cultura de baloncesto callejero. Es algo que, aunque pasen los años, yo siempre sentiré que he aportado mi granito de arena. Y es lo más bonito que me llevo después de todos estos años.

- Fuiste uno de los primeros en apostar por contenido de baloncesto en YouTube, ¿cómo surgió esa idea de ir a por ello y además poder vivir de ello?

Puntualizar que una vez es vivir de ello y otra es hacerte rico con ello. Esto es una industria que no mueve el dinero que puede mover otro deporte como el fútbol. Creo que he conseguido vivir de ello y estoy muy orgulloso, pero no te voy a mentir cuando te menciono que cada temporada de Ballers tiene su complicación a nivel de poder hacerla rentable, o incluso que cubran los gastos que tiene un proyecto como este.

Para nosotros diferenciarnos y hacer la producción tan chula que hacemos nos tenemos que gastar mucho dinero, también hay que viajar un montón de gente para que todos podamos ir todos, las cámaras, gente que nos ayuda con toda la logística, y eso al final tiene un coste que es el que es. Y si Ballers no se ha ido más lejos, y si no se ha ido a Gran Canaria, o no se ha ido a EEUU, o no se han ido por Europa más a menudo, es porque no se puede costear con los ingresos que genera en una temporada. Entonces sí, yo estoy orgulloso de poder haber dicho que durante un tiempo he vivido de esto, pero no significa que todo el mundo que hace contenido para el baloncesto pueda vivir de ello.

Tenemos grandes creadores de contenido que hacen un trabajo excelente y que a día de hoy aún no pueden permitirse vivir de esto y ojalá que Ballers también ayude a dar esa visibilidad y ese interés en un producto como el baloncesto que creo que es tan válido como muchos otros.

- ¿Cómo es un día en la vida de Oriol Tres, y cómo de diferente es a la que vivías cuando empezaste en YouTube?

Antes era mucho más caótico. Cuando empecé y en mis primeros años en YouTube era mucho más caótico en el sentido de que era alguien que trabajaba cuando me apetecía, y de repente trabajaba mucho y me pasaba los días enteros casi sin dormir. Después me pasaba tres días por ahí, levantándome tarde y jugando a la Play, y es verdad que cuando te haces mayor, empiezas a tener proyectos que requieren de más gente, eso me obligó a ordenar mi vida, a madurar mucho en ese sentido.

Ahora la verdad que cumplo unos horarios bastante fijos. Yo me suelo levantar a las 8 u 08:15, a las 9 entro a trabajar hasta las 13, más o menos, y en estas cuatro horas lo que suelo hacer es, pues, desde organizar todo el tema de si hay cualquier cosa que es prioritario... Y después también tenemos una academia, que es la Ballers Academy...

- ¿En qué consiste la Ballers Academy?

Hace un año y medio, viendo el impacto que tiene Ballers en la gente, siempre tenía la idea de que me gustaría hacer un negocio, que juntara el poder vivir de ello durante mucho tiempo, algo que a mí me llenara y me hiciera feliz, y por supuesto que aportara muchísimo valor a la gente que lo consumiera.

Yo tengo la idea de hacer una academia de tecnificaciones, son chicos y chicas, jugadores y jugadoras, que vienen a buscar un entrenamiento complementario a su club. Por ejemplo, si tú entrenas dos días a la semana, sumarle un tercero donde se dedique una hora entera a tu mejora exclusivamente particular, ya sea el tiro, sea el bote, sea la mano no dominante, y estamos en Barcelona.

Ahora es el segundo año que arrancamos y es bonito y lo disfruto, y me llena, pero también requiere mucho esfuerzo y muchísimas horas a nivel de organización de padres, de niños, de querer mejorar cada día, de un montón de cosas. Y eso también ocupa una parte muy grande de mi día a día. Lo hago con todo el cariño y el amor del mundo. Y ahí sí que te digo la academia es algo que quiero estar haciendo durante muchísimos años, y que ojalá sea así. Estamos muy contento, hemos trabajado con jugadores ACB este verano, hemos trabajado con la Selección española, de cantera de Barça, de la Penya, de grandes canteras, y creo que estamos haciendo un buen trabajo y que, aunque queda mucho por mejorar, vamos camino de ser una academia de referencia en el país, así que ojalá lo consigamos.

- Baloncesto, fútbol, pádel... ¿qué deporte te falta por practicar?

Sí, sí, soy un loco de los deportes. Cuesta mucho encontrar un deporte que no me guste jugar. También salgo mucho en bici para desconectar, me ayuda un montón a dejar el móvil, me obliga a estar unas horas fuera de cobertura y es algo que me encanta, salgo a correr también. Juego al fútbol, que me encanta, ya sea para entrenar y verlo también, que soy muy culé. Y la verdad que lo disfruto un montón, me veo todo. Yo me meto a ver los Juegos Olímpicos y me trago hasta el tiro con el arco.

- Como ocurrió con Arigeli este año, ¿te veremos a ti en la próxima Velada del Año de Ibai?

Yo creo que no soy lo suficientemente famoso para hacer una Velada. Creo que cada vez está creciendo más, y cada vez los perfiles son más grandes y más importantes. A mí por supuesto que si me preguntas me encantaría, pero creo que ya no va a llegar a ser oportunidad, aunque creo que el boxeo es un deporte espectacular, super duro, y que la preparación que tienen que pasar todos los creadores que hacen la velada es espectacular y muy brutal.

- Como culé, ¿qué esperas del Barcelona de baloncesto y del equipo de fútbol?

El de baloncesto está claro que es complicado y que la sección está en un momento crítico, pero creo que dentro del club hay gente muy buena, hay gente haciendo las cosas bien, y espero que poco a poco se transfiera en mejores resultados.

Y en el fútbol creo que como todo el culé seguidor del Barça, pues muy ilusionado. Creo que, como te decía, en mi trabajo es muy importante que la gente que tenemos enfrente represente lo que es tu esencia y creo que el Barça lo que había dejado los últimos años era eso mismo, que los jugadores fueran los mismos enamorados del club que los que están en la grada.

Creo que lo que han conseguido con este grupo de jóvenes es transmitir esa ilusión otra vez, gente que quiere mucho al club y que se deja el corazón por ello, y creo que es un poco la clave de ese éxito. Por supuesto hay que comunicarlo con talento, con un entrenador y tal, pero yo soy muy de emociones y creo que el corazón lo gana todo y espero que el Barça tenga buenos resultados.

“Alemania es el mejor equipo de este Eurobasket”

Oriol Tres

- ¿Estás siguiendo el Eurobasket? ¿Qué opinas?

Bueno, yo soy muy fan de las competiciones FIBA, creo que se ve un baloncesto espectacular, que tenemos a otros jugadores como Jokic, Antetokounmpo, el propio Alperen Sengun, el equipo de franceses, que son espectaculares. Es muy difícil, creo que Alemania es el mejor equipo. Creo que juegan un baloncesto precioso y que sus estrellas tratan de entender muy bien el baloncesto FIBA. Así que yo te diría que entre Alemania y Turquía. El equipo que no creo que gane es Grecia, que a mí no me gusta su estilo. Y creo que Giannis no encaja en todo bien en el baloncesto FIBA. Pero bueno, Giannis ya me ha callado la boca otras veces.

- ¿Qué opinas de la Selección española y su futuro?

Soy de una generación que estamos totalmente mal acostumbrados. Es decir, no es normal que un país como España de repente saque el nivel de talento que sacó en los últimos 15-20 años, y nos han malacostumbrado.

Es verdad que hay un tema de hacer las cosas muy bien desde la base, pero puede pasar esa transición que están viviendo ahora. Al final esto no es como un club que puedes ir a fichar y se acabó. Tienes disponibles unos jugadores, y el resto de selecciones mejoran también, como es el caso de Alemania o Francia, y simplemente creo que es la transición, que saldrán nuevos jugadores y que España sigue teniendo mucho éxito en las categorías de formación, y que eso acabará transfiriéndose al primer equipo a la absoluta.

Ahora estamos así, y ya se veía que estábamos basados en jugadores demasiado jóvenes o que los veteranos no tenían el nivel de los Pau y Marc Gasol, Navarro... No se puede tener siempre ese tipo de jugador y creo que no pasa nada por aceptarlo y saber que es un periodo de transición y que estoy seguro que irán a mejor. Y yo estaré ahí para verlo.

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