Alaska da el último parte de salud de Mario Vaquerizo: “Habrá días mejores y peores”

Con el paso de los días se va apagando la preocupación por el estado de salud de Mario Vaquerizo. El líder de Nancys Rubias inyectó el susto en todos aquellos que asistieron al festival de música Horteralia de Cáceres cuando, en plena —y primera— actuación, se cayó desde la plataforma giratoria en la que se erguía hasta el foso. Aunque, tal y como él mismo ha revelado, pudo ser mortal, ‘únicamente’ se fracturó la vértebra 4 y 6 y sufrió una pérdida de visión. Con el paso de los días, son cada vez más tranquilizantes los mensajes que de su entorno brotan, desvaneciéndose la preocupación inicial entre optimistas declaraciones.

Aunque la recuperación pudo parecer rápida en un primer estadio, el rápido regreso a un centro médico de Madrid el jueves 24 de octubre hizo presagiar lo peor. Nada de eso. Así lo ha señalado su mujer, Alaska, que ha respondido con una sonrisa a los medios que la han ‘asaltado’ durante la celebración de los premios Mujer Hoy. “Mario ayer estuvo fenomenal, muy bien, habrá días mejores y peores. Tampoco sabemos. No hay un diagnóstico todavía, estamos esperando. Pero muy tranquilos de que esté en el hospital”, ha asegurado, incidiendo en que, precisamente, allí debe permanecer hasta que su propio cuerpo lo precise: “En el hospital se siente muy cuidado y muy seguro, todo lo que es movimiento...”.

De hecho, recuerda la dificultad que entrañaron las horas en las que intentó completar la recuperación en su propio hogar y, alejada de cualquier duda, contempla la bendición del centro sanitario: “Me acuerdo del día que estuvo en casa, era ‘no me has puesto bien esto, me la has apretado demasiado...’. Allí con lo que le hagan los médicos se tiene que conformar, yo me quedo más tranquila”. Su calma reina sin oposición por la seguridad que transmite saber que el escenario no es, ni de lejos, el que podía haber sido: “Obviamente estamos ante una persona que se va a recuperar, no sería lo mismo de otra forma. No hay que dramatizar de más”.

Mario, el primer optimista

El propio Vaquerizo se pronunció un día antes a través de Instagram para enviar un mensaje de idéntica índole tranquilizadora. “Aquí seguimos, muy bien cuidado por los médicos, enfermeras, auxiliares, celadores... en fin, ¡qué personas tan totales y profesionales! Bien cuidado y además protegido por mis vírgenes y santitos, que siempre me ayudan y acompañan”, expresó.

En cuanto a las citadas fracturas de las vértebras 4 y 6, así como la pérdida de visión, se mostró cauto: “Los ojitos y el cuello, pues... poquito a poco”. Y así seguirá, lento hasta la plena recuperación, pero con paso firme y optimista; el preocupante brillo de la incertidumbre se apaga con el paso de las horas.

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