El sorprendente proyecto al que Alves dedica su tiempo en la cárcel
La periodista Mayka Navarro, quien publicó esta semana una entrevista en exclusiva hecha al futbolista en la cárcel, sigue dando nuevos detalles de su encuentro.
El encuentro entre Dani Alves y Mayka Navarro en el centro penitenciario Brians 2 sigue dejando titulares. La periodista de La Vanguardia no pudo introducir la grabadora en la cárcel durante su vis a vis con él, por lo que, tras publicar una entrevista en dos partes en el periódico, continúa desgranando más detalles del momento durante sus colaboraciones en El programa de Ana Rosa.
Uno de los datos más curiosos extraídos de su cita tiene que ver con el proyecto que está llevando a cabo el brasileño durante sus ratos libres en el penal, donde se encuentra encerrado tras ser denunciado por una joven de 23 años que le acusa de agredirla sexualmente en el baño del reservado de la discoteca Sutton de Barcelona la noche del pasado 30 de diciembre: “Estoy dedicando mucho tiempo a leer y a escribir. Tengo varios proyectos, uno es sobre mi biografía, centrada en la experiencia que estoy viviendo aquí dentro. Las enseñanzas vitales de todo este proceso que ayudan a alguien”.
Además, aprovecha también ver la televisión: “Tengo tele, pero para ver el fútbol y el canal que dan todo el rato los capítulos de la serie La que se avecina, me los sé de memoria. Soy capaz de reproducir los monólogos”.
Su experiencia en la prisión
Alves, quien se encuentra bastante desmejorado en palabras de la periodista, que dice que no lo reconoció cuando acudió al encuentro, explica cómo fue su ingreso en la prisión: “Cuando entré por esa puerta, al primer funcionario de prisiones que me atendió le dije: ‘Soy Dani Alves, el futbolista internacionalmente conocido se ha quedado detrás de la reja, aquí está el hombre’”.
“He estado en sitios y situaciones muchísimo peores. En prisión pierdes la libertad, pero la gente aquí es muy amable. No tengo ninguna queja”, revela.
Y sigue defendiéndose: “No ha habido ni una sola noche que yo no haya dormido tranquilo. Ni una sola noche. Tengo la conciencia tranquila. Nunca he hecho daño voluntariamente a nadie, y a ella aquella noche tampoco”.