El memorable concierto de Foo Fighters para homenajear a Taylor Hawkins
Grandes artistas del rock rindieron tributo en Wembley al difunto batería en un concierto donde destacó la actuación del hijo adolescente del propio Taylor.
Dicen que la música es la banda sonora de la vida. Y aquellos que tuvieran el privilegio de acudir a Wembley a escuchar en directo el primer concierto de Foo Fighters desde el fallecimiento repentino de su batería, Taylor Hawkins, no podrán ponerle ni un solo ‘pero’ a esa frase. El colosal estadio londinense se llenó de grandes iconos del rock para rendir tributo a uno de los músicos más queridos del grupo.
Representantes de míticas bandas como The Police, AC/DC, Metallica, Queen o Led Zeppelin, junto con otros artistas como Liam Gallagher, Kesha o Paul McCartney quisieron estar presentes en el que fue uno de los mejores espectáculos musicales de los últimos tiempos. La unión entre la emoción del homenaje y algunos de los mejores músicos de la historia tuvieron como resultado un evento inolvidable tanto para el público como para los propios componentes de Foo Fighters.
Tanto es así que Dave Grohl, el vocalista del grupo estadounidense, tuvo que detener alguna canción por la emoción que asolaba a todos sus compañeros. Y es que la muerte de Taylor, en cuyo organismo fueron encontrados restos de diez sustancias opioides y antidepresivas, pilló por sorpresa a todos en plena gira.
“Estamos aquí para celebrar la música, la vida y el amor a Taylor. Él siempre estaba haciéndote sonreír”, recordaba Grohl a su compañero antes de lanzarle un mensaje: “Sé que estás mirando. Sé que puedes escuchar esto. Sé que puedes sentirlo. Te amamos”, destacó.
Entre tantas estrellas brilló el hijo de Taylor
Rodeado de tantos artistas de renombre, la mayoría de los focos se dirigieron hacia el hijo del malogrado batería, Shane. El adolescente, con tan solo 16 años, se puso al mando de las baquetas para acompañar al grupo de su padre en la canción My Hero. Un tema de una suma complejidad que desató la locura entre los presentes.
La actuación del joven dejó en una leve sombra otro de los grandes hitos de la noche. Por primera vez en la historia, Paul McCartney, el legendario bajista de The Beatles, cantó en directo Oh, Darling, algo que no había hecho hasta entonces porque su registro de voz no llega con facilidad a las notas.
Un segundo concierto en Los Ángeles
El recuerdo desde la batería de Shane fue un gran colofón al primer concierto de la banda desde el deceso del músico. Pronto, el próximo 27 de septiembre, volverán a homenajearlo, aunque esta vez al otro lado del charco, en el Kia Forum de Los Ángeles. Allí volverán a compartir escenario con grandes grupos como Red Hot Chili Peppers y otros todavía por confirmar.