El lujoso hotel de Madrid donde comenzó el romance de Daniel Sancho y Edwin Arrieta

Daniel Sancho se ha convertido en el protagonista inesperado del verano. El hijo de Rodolfo Sancho pasa los días en la prisión tailandesa de Koh Samui tras haber confesado que asesinó y descuartizó al cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta. Una historia de amor que acabó de la peor manera posible, y que empezó en Madrid hace unos años, tal y como ha desvelado en exclusiva el programa Fiesta de verano.

El formato de Telecinco ha compartido el lugar en el que tuvieron los primeros encuentros Daniel Sancho y su víctima. Se trata del Hotel Wellington de Madrid, uno de los complejos hoteleros más lujosos y exclusivos de la capital española gracias a sus servicios y a su ubicación, situado en el concurrido barrio de Salamanca y a tan solo 100 metros del Parque del Retiro.

Sin embargo, el precio de una habitación no se ajusta a todo tipo de bolsillos. Según recoge booking.com, web que compara ofertas de alojamiento, la reserva para una noche cuesta entre 1.500 y 2.000 euros. El valor puede incrementar en función del dormitorio que se trate y de los servicios que demande el propio cliente.

“La primera semana fue la peor”

El citado programa se ha puesto en contacto con Watcharapong Boonsaoir, director de la prisión en la que se encuentra interno el hijo del actor, para conocer la última hora del preso. El funcionario asegura que Daniel se comporta “muy bien” y participa en las tareas de la cárcel. “Dani en estos momentos está bien, aquí cuidamos a todos por igual, pero intentamos que se sienta bien porque no tiene a la familia cerca y los presos también necesitan calor”.

El cocinero sigue aislado de los otros presos por culpa del problema de salud que arrastra, que le obliga a estar interno en el módulo de enfermería. El director de la prisión cuenta que los médicos le “están preparando” para convivir con otros reclusos. “Daniel tiene muchos dolores en la espalda, aunque ya ha mejorado algo, estará en la enfermería hasta que el médico esté seguro de que se encuentra bien y de que esté preparado para enfrentarse a vivir en la prisión con los demás, hay que prepararle mentalmente para enfrentarse a eso”.