El equipo de ‘Sálvame’ recuerda a Mila Ximénez en el tercer aniversario de su muerte

Tres años han pasado desde que Mila Ximénez cerrase los ojos para siempre. Un año antes de su fallecimiento anunció en Sálvame, su hogar televisivo, la realidad de su terrible diagnóstico. “Estoy jodida, asustada y tengo ganas de contarlo”, fueron las palabras que precedieron a la noticia de su cáncer de pulmón. Durante un calendario luchó para superarlo, consciente de la dificultad que entrañaba este mal, hasta que, finalmente, murió un 23 de junio de 2021.

La relación de la televisiva con sus compañeros del extinto formato de Telecinco era algo más que laboral. Se querían, se cuidaban. Su marcha fue un auténtico golpe para todos ellos, que cada cierto tiempo la recuerdan públicamente; aquellos que, diariamente, la piensan en silencio. Muchos de sus antiguos compañeros la han recordado hoy a través de sendas declaraciones que La Razón recoge a modo de reportaje.

Aunque separa una brecha cada vez más insalvable a algunos de ellos, visible desde hace semanas estas rencillas tras el estreno de Ni que fuéramos shhh, la amistad que todos mantenían con Mila les une en la oscuridad que muchas veces desprende esta trinchera de comentarios.

“Guerrera por fuera y un trozo de pan por dentro”

Carmen Borrego, siendo la situación entre el clan Campos y los antiguos colaboradores difícil, se ha deshecho en elogios al recordar a la periodista. “La mejor colaboradora que ha tenido la televisión, un medio que perdió mucho cuando perdimos a Mila. Tenía un fuerte carácter, pero era la persona con mayor capacidad de pedir perdón que yo he conocido”, ha dicho, resumiendo después lo que su memoria le susurra con pocas y sinceras palabras: “En definitiva, fue una grandísima periodista y una extraordinaria mujer”.

Todos se han pronunciado en la misma línea. Chelo García Cortés confiesa que siente mucha añoranza, fruto de los recuerdos con ella. “Era súper cariñosa y tierna. Una cosa es el trabajo, en el que la veíamos aguerrida, y otra su vida personal. Por eso te digo que al mismo tiempo era sensible y dura, una mezcla de ambas, pero en las distancias cortas prevalecía su sensibilidad y su ternura”, expresa.

También asaltan los buenos recuerdos a Gustavo González, que incide en los pocos obstáculos que encontraba Mila para pedir perdón cuando así lo sentía. “Era una mujer que no tenía parangón, fue inigualable, con sus contrastes, por un lado súper explosiva, y por otro extremadamente sensible”, dice, destacando su capacidad para reinventarse. Todo ello lo recoge Gema López para asegurar que Mila Ximénez era, directamente, “el icono de Sálvame, una figura irrepetible de la televisión”. Carmen Alcayde, que la conoció durante su etapa como presentadora de Aquí hay tomate, la ha definido como “impulsiva y arrebatadora, fuerte y guerrera por fuera y súper buena, un trozo de pan, por dentro”.

Todo ello viaja a la mente de este grupo de colaboradores, que, según confiesa Lydia Lozano, siguen teniéndola presente como alma guía en cada uno de sus proyectos: “Nos preguntamos qué haría Mila en determinadas situaciones, siempre la tenemos en boca”.

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