TELEVISIÓN

El día en el que casi mueren Pablo Motos y Marron en un experimento en ‘El Hormiguero’

El presentador y el colaborador confesaban que “se nos habían llenado las vías respiratorias” por una avalancha de bolitas de poliestireno.

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Pablo Motos y Jorge Marrón conversando en un programa de El Hormiguero, de Antena 3.

‘El Hormiguero’ es uno de esos programas que conoce muy bien lo que es el éxito en la televisión. Lo demostró primero en su etapa en Mediaset, cuando se emitía en Cuatro; y lo sigue haciendo ahora en Antena 3, liderando cada noche en el prime-time.

El programa ha demostrado ser arriesgado, en ocasiones incluso demasiado, a raíz de sus grandes experimentos en directo. De hecho, cuando se emitía en Cuatro, Pablo Motos y Marron se vieron inmersos en un experimento que estuvo a punto de salir mal y costarles la vida.

Todo ocurrió en un experimento que recibía el nombre de ‘Avalancha de la muerte’, donde presentador y colaborador se jugaron el tipo para ejemplificar qué había que hacer para sobrevivir a una avalancha, pero en lugar de nieve, sería por bolitas de poliestireno. Una avalancha que obligó al equipo del programa a rescatarles por un fallo de cálculo.

Marron recordó en una entrevista posterior que “se nos habían llenado las vías respiradoras”. “Recuerdo aquel momento con mucha angustia porque estuvimos a punto de morir”, añadió después, a lo que respondió Jorge Salvador diciendo que ahora existen más medidas de seguridad: “De todo lo malo hay que sacar algo bueno, ahora hay más medidas de seguridad en ‘El Hormiguero’ y los ensayos de los experimentos son exactamente iguales que como serán en el programa”.

Tuvieron pesadillas “como un mes”

El propio Pablo Motos señalaba también que, como recuerdo de lo que pasó, tiene debajo de la mesa de su despacho una caja con varias bolitas de poliestireno. “Hicimos una sección que se llamaba ‘La avalancha de la muerte’. Nos echaron miles de kilos de este corcho que nos quitó las mascarillas, nos ahogó y casi morimos los dos. Luego estuvimos como un mes, más o menos, teniendo pesadillas y pensamientos bastante raros. Lo tengo aquí para acordarme de lo frágil que es la vida y de la suerte que tengo de estar vivo. Quería compartirlo con vosotros”, confesó.

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