El creador de ‘LQSA’ se despacha contra Telecinco en su mínimo histórico
Alberto Caballero hace su particular análisis tras el cambio de programación del último capítulo emitido de su ficción en la cadena líder de Mediaset.
‘La que se avecina’ está de regreso en Telecinco, aunque no con el éxito esperado. El estreno en abierto de la segunda parte de la duodécima temporada no ha contado con el habitual respaldo por parte de los seguidores de una de las series más longevas de nuestra televisión. El capítulo emitido este lunes ha anotado su mínimo histórico con el cambio de programación de última hora por parte de Mediaset.
Y es que, la principal cadena del grupo de comunicación de Fuencarral, hacía un inesperado movimiento en su parrilla que trastocaba por completo a los espectadores ya que se adelantó su horario de emisión. El capítulo se anunciaba en Telecinco para las 22:00 horas tras la decisión de Telecinco de retirar sus habituales ‘access prime time’: ‘Ucrania, esto no se podrá olvidar’ y ‘Secret Story: última hora’. “Están anunciando #LQSA a las 22:00. Sería taaan bonito”, publicaba Alberto Caballero en su Twitter con cierta desconfianza.
Efectivamente, pocos minutos después de las 22 horas comenzaba el capítulo número 164 de ‘La que se avecina en Telecinco’ para llegar a su fin antes de las 00 horas. Una modificación de horario que ha mermado en la audiencia bajando 4,5 puntos respecto a la semana pasada. Este lunes la ficción de Alberto Caballero ha anotado un 11% de cuota de pantalla, 1.600.000 espectadores.
Las palabras de Alberto Caballero
Pese a esta bajada de audiencia, Alberto Caballero se muestra contento con los datos, aunque no tanto con las últimas decisiones de la cadena. “Pues lo veo un éxito”, dice. A través de su cuenta de Twitter, el productor deja claro que está encantado con el nuevo horario, pero que, a su parecer, esta decisión llega demasiado tarde. “La pena es no haber probado esto con capítulos que no lleven un año en plataforma”, comenta. “Qué gusto que una serie empiece a las 22:09 horas. Me ha teletransportado a 2005. ¡Gracias, queridos!”, concluye.