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Rodolfo Sancho abandona Tailandia por “una razón de peso”
El actor pondrá rumbo a España este fin de semana tras siete días en el sudeste asiático donde ha podido visitar a Daniel Sancho hasta en dos ocasiones.
Rodolfo Sancho llegó a Tailandia el pasado domingo, un mes después de que su hijo fuera detenido tras confesar que asesinó y descuartizó a Edwin Arrieta en la isla de Koh Phangan. A pocas horas de que se suba a un avión para regresar a España y tras dos visitas a Daniel en la cárcel de Koh Samui, el actor desvela parte de la conversación que ha podido tener con el joven. Unas palabras que ha recogido el programa ‘Código 10′.
En sus dos cara a cara con Daniel Sancho, Rodolfo ha abordado diversos asuntos relacionados con el crimen con el fin de conocer más datos que puedan ayudar a los abogados a gestionar mejor su defensa de cara al juicio en el que podría ser condenado a pena de muerte o cadena perpetua. En una de las conversaciones, el intérprete le ha aconsejado “que esté lo más tranquilo que pueda” ya que las próximas semanas, meses, e incluso años, pueden ser muy difíciles.
El actor de ‘El ministerio del tiempo’ también vive un periodo complicado. Y es que de la noche para la mañana, Rodolfo Sancho veía como su tranquila vida y su bajo perfil se rompían en mil pedazos tras el macabro crimen protagonizado por su hijo. Una fuerte presión mediática a la que no está acostumbrado, ni él ni su familia. Sin embargo, el madrileño está volcado en el caso con la clara misión de poder ayudar a Daniel. “Quiero dejar claro que mi hijo ama Tailandia, su gente y su cultura”, expresaba en sus primeras horas en Koh Samui a favor del joven.
Razón de peso para volver a España
A diferencia de Silvia Bronchalo que lleva varias semanas en Tailandia, Rodolfo Sancho pondrá rumbo a España a lo largo de este fin de semana. Una viaje de tan solo una semana al sudeste asiático que ha servido para reencontrarse con su hijo y obtener más detalles del caso.
Ramón Chippirrás, portavoz de la familia Sancho, admite en ‘ABC’ que el actor vuelve ya a Madrid por una razón de peso. ”Él sabe que su presencia en el país perjudica a su hijo. Principalmente, por la presión mediática. Hay una gran molestia con los periodistas que se congregan en la prisión tailandesa. Y yo solo por parte de quien dirige el centro, también las instancias superiores”, cuenta.