Así es la ‘alocada’ vida de Hulk Hogan, leyenda de la WWE

El nombre de Hulk Hogan se encuentra en la cima de la historia de la WWE tras ser uno de los luchadores más reconocidos por la audiencia de este deporte de contacto. En 1983, inició su carrera en el campeonato de la WWF, donde obtuvo hasta en seis ocasiones el título. No obstante, su fama y popularidad ha sido la marca personal del americano durante toda su carrera, donde también ha participado en producciones televisivas y cinematográficas como actor, donde debutó en la tercera saga de la película de Rocky Balboa.

Actualmente, a sus 68 años su vida ha cambiado, pero el deseo de los espectadores de la lucha libre americana es su vuelta al ring. Sin embargo, esta reaparición es muy poco probable debido a un problema de salud que arrastra y que le obliga a visitar un fisioterapeuta para así aliviar sus dolencias, según confirmó su amigo Eric Bischoff. Esto no es todo, la vida del televisivo ha sufrido una serie de irregularidades debido a polémicas que han manchado su nombre, desde comentarios racistas hasta un vídeo sexual con la esposa de su mejor amigo.

Los escándalos de Hulk Hogan

Allá por el 2012, el luchador nacido en el estado de Georgia vivió uno de los escándalos más recordados en la prensa americana. El ilustre luchador se acostó con la mujer de su mejor amigo, Bubba the Love Sponge, y cuya grabación se difundió en muchos medios de comunicación. De hecho, un blog de noticias estadounidense, ‘Gawker’, fue el encargado de reproducir un fragmento de ese contenido en su página web, pero el resultado fue el esperado y esta compañía tuvo que indemnizar a Hogan con 31 millones de dólares por difamación, pérdida de privacidad y dolor emocional.

Incluso, él mismo reconoció que lo que hizo no era lo apropiado. “Estaba con unos amigos y me equivoqué de elección. Me ha destrozado, nunca había estado tan dolido”, confesó a Howard Stern, periodista radiofónico. Esto no es todo, también fue acusado de racismo debido a los comentarios acertados hacia el novio de su hija, el rapero Stacks. “Soy racista hasta cierto punto, ya sabes, malditos negros, pero luego, cuando se trata de gente agradable...”. No obstante, tuvo que maquillar sus palabras semanas más tarde y aseguró que las personas que le conocen saben que no es racista.