Arturo Valls estuvo a punto de ser despedido en ‘Caiga quien Caiga’: “Imagínate el bajón”

Arturo Valls puede presumir de ser uno de los presentadores de televisión más carismáticos en toda España. Su buen hacer en la pequeña pantalla le han ayudado a tener programas propios, y también a aparecer en la gran pantalla como actor, sobre todo en tramas dedicadas al humor, su gran fuerte.

Ahora bien, a pesar de que en el presente sea reconocido, el presentador valenciano no tuvo unos inicios muy fáciles en el mundo del periodismo, sobre todo cuando llegó a la televisión en 1998, de la mano del programa ‘Caiga quien Caiga’, que presentaba El Gran Wyoming. Un programa sobre el que ha hablado en una entrevista concedida a Raúl Pérez en el programa ‘A las Bravas’, de la Cadena SER.

Valls ha confesado que estuvieron a punto de despedirle cuando empezó como reportero: “Cosas de productores... que dicen: ‘Este es el que acaba de llegar, no acaba de brillar...’. También los reportajes a los que me llevaban eran los más chungos, los más difíciles de sacarles brillo”.

Una serie de reportajes entre los que destaca el día que fue al río Segura porque tenía mal olor por la contaminación: “Había uno donde la gente cantaba: ‘El río Segura huele a mierda pura’, porque el río estaba contaminado. Saca tú algo ahí de ese reportaje...”.

Y a raíz de aquello, uno de los productores comentó que su paso por el programa podría llegar a su fin: “Me dicen que soy un reportero de segunda en un programa de primera, y ahí me tiemblan las piernas y se me viene todo abajo. Yo estaba haciendo Periodismo en Valencia, hago una tele local, de repente me llaman, hago aquí las pruebas, me meto en el Caiga... No hubiera pasado nada, pero imagínate el bajón”.

Logró cambiar la situación

Estuvo a punto de ser despedido, pero la situación cambió gracias a los que fueron sus compañeros en el programa: “De repente, Carbonell, Wyoming, Edu Arroyo, director del programa en ese momento..., me dicen que a este tío igual hay que darle otra oportunidad, que puede estar bien. Y así fue. Y se plantaron ahí, diciendo que querían que yo siguiese, y aquí estoy”.