Álvaro de Luna entierra el hacha de guerra con Laura Escanes

Su amor se fraguó tan rápido que casi dio la sensación de que sería para siempre. Y se esfumó igual de raudo, abrupto como el rayo que parte la rama de un árbol y de manera tan escarpada que donde antes reinaban las sonrisas comenzó a instalarse una guerra mediática. Laura Escanes y Álvaro de Luna no han dejado de ser noticia desde el pasado otoño por los comentarios que ella le ha dedicado más de una vez y las canciones que el artista ha llenado de indirectas también en más de una ocasión.

Quien se pronunció por última vez fue la influencer catalana, que escribió a través de sus redes sociales algunas frases de carácter misterioso que deslizaban una mala relación entre los dos antes, incluso, de poner fin a su historia de amor. “Cómo cagarla conmigo ocultándome algo” o “me vio llorando y no cambió” eran algunas de las oraciones, que vino a completar dándole su apoyo digital —esto es, un ‘me gusta’— a un mensaje de otro usuario que, en resumidas cuentas, tachaba de mentiroso al cantante: “Está diciendo que no mienta en sus canciones”.

“Ha pasado mucho tiempo y creo que nos saludaremos”

Pero como ni agua pasada mueve molino ni las ascuas de aquel distanciamiento parecen avivar el alma de viejos odios, Álvaro de Luna tiende un puente a su expareja e insiste en que los reproches, que los hubo, son cosa del ayer; el músico fue preguntado durante la celebración de los 30 años de la revista GQ y, frente al micrófono de Europa Press, respondió con aparente sinceridad qué haría en caso de cruzarse con Laura Escanes.

“Obviamente nos saludaremos, creo que es de ser coherente el saludarnos, somos adultos, ha pasado mucho tiempo y creo que nos saludaremos”, confesó, agregando que a aquel sitio había acudido a pasárselo bien, “como todos, que al final es lo que todos queremos hacer, pasarlo muy bien y disfrutar” y que con la creadora de contenido barcelonesa ya no tenía ningún problema.

No dejó interrogante sin contestación y, cuando le plantearon cómo veía el amor después de aquello, despejó cualquier atisbo de duda y rumor de reconciliación con su exnovia, Jelen Patiño, al asegurar que no había vuelto a enamorarse después de su última relación y que, no por ello, cierra la puerta a nada. “Siempre hay que tener ganas, no hay que estar cerrado al amor. El amor aparece cuando nadie lo espera, que esté muy activo para que pase, no; ¿que pasa? Pues pasó, ya está”, resolvió.

Fue definitiva la rúbrica de la paz cuando confirmó que no habría más dardos envenenados en sus letras hacia ninguna de sus antiguas parejas. “No, no hay nada, es todo de buen rollo, muy para disfrutarlo, para bailarlo, para dedicarlo con cariño y ya”, zanjó, destensando lo abrupto de un punto y final que, durante meses, abrió un precipicio insalvable entre Álvaro de Luna y Laura Escanes.

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