Alejandra Rubio, sobre Gustavo Guillermo: “Hace veinte días dimitió”

La entrada de Gustavo Guillermo en Gran Hermano fue una de las más destacadas del estreno del programa presentado por Marta Flich. El que fue la mano derecha de María Teresa Campos durante gran parte de su carrera como comunicadora confirmó su participación en el formato antes de la muerte de la presentadora de televisión y, pese a que su rostro demostraba no estar pasándolo bien por los acontecimientos, Gustavo cumplió con su compromiso desplazándose hasta Guadalix de la Sierra.

Pese a que su nombre estaba en muchas de las quinielas previas al estreno del jueves, Alejandra Rubio ha confirmado en Así es la vida que no sabía nada de la participación de Gustavo. Además, ha agregado que, después de veinte años trabajando con la primera del clan de las Campos, “hace unos 20 días presentó la dimisión y dijo que ya no iba a trabajar más con mi abuela”.

“No nos esperábamos que, de repente, en un momento en que mi abuela estaba mal, presentara esa dimisión. Ahí es cuando empezaron las negociaciones de Gran Hermano. Intuimos que podía ser por eso, también por rumores, pero nadie dijo nada”, ha agregado. Según su versión, tampoco sabían nada ni Terelu ni Carmen Borrego hasta que él mismo se lo contó a la primera después del funeral de la comunicadora.

Buscó defensora

Nada más entrar al reality, Gustavo no tuvo reparo en asegurar que su presencia no era más que “un regalo” de María Teresa. De hecho, recordó conversaciones en las que confesó que la comunicadora le había invitado en varias ocasiones a aceptar una oportunidad así si terminaba por presentársele. Sin embargo, tal y como ha apuntado Rubio, su abuela no llegó a saber que iba a participar en Gran Hermano.

Además, Gustavo Guillermo intentó que Terelu o Carmen Borrego fueran sus defensoras, aunque ninguna de las dos ha aceptado la oferta. “Yo he alucinado. No lo digo ni a mal ni a bien. He flipado porque me parece que... no me lo quería creer. […] Que mi abuela estuviera tan malita y presentara la dimisión para entrar en un reality...”, ha zanjado Rubio dejando caer su descontento tras la decisión de quien María Teresa Campos llegó a bautizar como “el hijo que nunca tuvo”.