TELEVISIÓN

'Viernes Deluxe': Lucía Dominguín, a punto de quitarse la vida tras el secuestro de sus hijos

Este viernes, la hermana de Miguel Bosé ha sido la invitada al espacio de Telecinco, donde ha contado uno de los episodios más complicados de su vida.

Imagen de Lucía Dominguín en 'Viernes Deluxe'.

Este viernes ha vuelto a tener lugar una nueva entrega del 'Deluxe', el cual se ha pasado a este día como estrategia para dejar el sábado, en su prime time, el programa de 'Top Star'. En esta ocasión, el espacio ha tenido como invitada a Lucía Dominguín, quien últimamente ha pasado de verse en las cocinas de 'Masterchef Celebrity', a los platós de 'Supervivientes' para defender a su hija, Palito.

La hermana de Miguel Bosé ha hablado largo y tendido sobre su vida personal, así como del momento más traumático de su vida, que fue cuando secuestraron a sus hijos, lo cual le llevó a situaciones extremas.

Todo fue a raíz de su relación con su exmarido, Alessandro Salvatore. Tal y como ha contado Lucía, ambos acordaron dejar a los pequeños con el padre durante las vacaciones de verano y el resto del año con su madre, hasta que todo cambió cuando la que fuera su suegra le dijo que tratase de olvidarse de ellos, que no iban a volver con ella. "No volverás a ver a tus hijos, se quedan aquí", ha comenzado señalando.

A punto de suicidarse

Después de que le dijesen eso, lo primero que se le pasó por la cabeza era quitarse la vida. "Cogí el Renault 5 que tenía y me fui a estamparme, me habían quitado los pilares de mi vida. Estuve a un centímetro de estamparme y de quitarme la vida, pero a mitad de camino me dije: 'lucha por tus hijos'", ha apuntado.

Al echarse atrás, Lucía Dominguín, con la ayuda de su padre, el torero Luis Miguel Dominguín, contactó con unos investigadores privados y movilizó a gente en México y Estados Unidos para encontrar a los pequeños. Un año después, aun esperando a verles, Lucía se dedicó a tocar el saxofón, trasladándose a Estados Unidos. Aquello hizo que a los cuatro meses siguientes, consiguiera ver a Bimba y a Olfo -de 11 y 6 años por entonces-. Un encuentro de lo más frío, tal y como ha señalado la madre: "El día que los vi fue terrible, yo temblaba, ellos estaban muy distantes y fríos conmigo".

A ese duro episodio, Lucía también ha querido añadir otro que ocurrió en uno de los cumpleaños de Olfo, cuando llegó a casa de su exmarido y la pareja de éste, para darle el regalo al pequeño, le subió a su coche: "Él salió de casa en su coche, con su mujer y mis hijos, y al ver que no paraba me lancé encima del coche y me arrolló". Tras parar, llegó la policía y la llevaron a comisaría: "Decían que estaba loca y tuve que estar 15 días yendo a psicólogos para demostrar que no". Además, a Bimba y Olfo les hicieron creer que Lucía les había abandonado.

Su calvario no acabó ahí, pues tras mudarse a Mallorca, la hermana del Miguel Bosé vivía aterrorizada, pensando en que pudieran volver a quitarle a sus hijos y llevarles de nuevo lejos de ella, aunque esto no pasó. Sin embargo, una vez si que encontró al hermano de su exmarido espiándola, tal y como ha relatado.