16 Octubre: Día Mundial de la Alimentación
La FAO proclamó la celebración de este día en 1979 y desde 1981 se centra en distintas campañas. Este año: el cambio climático.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) proclamó la celebración del Día Mundial de la Alimentación en 1979 con el objetivo de concienciar sobre el problema alimentario mundial y fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza.
Desde entonces, más de 150 países se han implicado en su celebración apoyando las distintas campañas anuales que pone en marcha la FAO desde 1981.
La campaña de este año
Tras el histórico acuerdo alcanzado en París en la Cumbre del Clima y con el telón de fondo de la próxima conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático, del 7 al 18 de noviembre en Marrakech (Marruecos), la FAO ha querido centrar su campaña de este año en los peligros que implica este problema en la alimentación y en la agricultura. Así, ésta se sostiene sobre el siguiente lema: “El clima está cambiando. La alimentación y la agricultura también”.
La FAO alerta de que el cambio climático pone en peligro la seguridad alimentaria y está afectando, sobre todo, a las personas más pobres del mundo. Además, también explica que ante la imparable crecida de la población mundial, prevé que en 2050 alcance los 9.600 millones de personas, es fundamental que los sistemas agrícolas y alimentarios se adapten a los efectos adversos del cambio climático y se hagan más resilientes, productivos y sostenibles. “Es la única manera de que podamos garantizar el bienestar de los ecosistemas y de la población rural y reducir las emisiones”, sostiene la organización en su página web.
Medidas a tomar
La FAO estima que la producción agrícola deberá aumentar un 60% para 2016 y que los países deberán implementar varias medidas para combatir los efectos del cambio climático y alcanzar la meta de Hambre Cero que se pretende alcanzar en 2030. Éstas son algunas de ellas:
- Mejorar la gestión del ganado: La ganadería es responsable de casi dos tercios de los gases de efecto invernadero agrícolas (GEI), y del 78% de las emisiones de metano agrícolas.
- Gestionar de manera sostenible los bosques: Su deforestación y degradación supone entre el 10-11% de las emisiones globales de los gases de efecto invernadero.
- Abogar por la pesca responsable y velar por la conservación y gestión de los océanos, ríos y lagos: En 2050, la pesca podría disminuir hasta un 40% en los trópicos.
- Usar los recursos naturales de forma sostenible y gestionar de manera adecuada los suelos.
- Reducir la pérdida y el desperdicio de los alimentos producidos, actualmente es más de la tercera parte.
¿Qué podemos hacer nosotros?
La FAO también propone varias medidas para que las personas también hagan frente al cambio climático y contribuyan a través de sus hábitos a combatirlo.
Para preservar los recursos naturales de la tierra:
- No desperdiciar el agua.
- Diversificar la dieta alimentaria e intentar comer más verduras y menos carne.
- Consumir pescados de las especies más abundantes.
- Comprar productos orgánicos.
- Mantener limpios los suelos y el agua.
- Usar energía eficiente.
- Usar paneles solares u otros sistemas ecológicos de energía.
Para reducir el impacto ecológico:
- Comprar solo lo necesario.
- Comprar las frutas y verduras más ‘feas’.
- Entender bien las etiquetas de los productos y su fecha de caducidad.
- Intentar reducir la compra de plásticos.
- Reciclar papel, plásticos, vidrios y aluminio.
- No desperdiciar comida y guardar la sobrante para otro momento.
- Conservar bien la comida que se haya comprado.
- Hacer compost con los desperdicios de las frutas y verduras.
Otras formas de ayudar:
- Usa el transporte público o la bicicleta.
- Compra en comercios locales.
- Promueve que las cosas no se tiren, dale a tus amigos y familiares lo que no quieras o dónalo a alguna organización.
- Ahorra papel y protege los bosques.