Djokovic y un “deseo increíble”

Hace 25 días, Novak Djokovic pasó por el quirófano para ser operado de un desgarro en el menisco medial de la rodilla derecha, lesión que se produjo un par de jornadas antes, cuando jugaba en octavos contra el argentino Francisco Cerúndolo. El periodo de convalecencia estimado era de tres semanas, pero no habían pasado dos cuando el serbio empezó a correr y el pasado domingo aterrizó en Londres para entrenarse con vistas a Wimbledon. Este sábado confirmó que, si no le ocurre nada malo de aquí al próximo martes, competirá contra el checo Vit Kopriva en la primera ronda.

“Tengo algo que se describiría como una sensación de no perderme un Grand Slam mientras todavía puedo jugar y aún esté activo y a este nivel. No lo llamaría miedo a perdérmelo. Solo diría que es un deseo increíble de jugar. Sobre todo porque es Wimbledon, el torneo que siempre ha sido de ensueño para mí cuando era niño. La sola idea de no estar Wimbledon no era correcta”, explicó Djokovic en el día de medios cuando le preguntaron si jugar en el All England Club podría poner en riesgo su concurso en los Juegos Olímpicos de París (desde el 27 de julio).

“Mi esposa también hizo la misma pregunta. Lo cual es normal porque tengo 37 años. Y repito que no vine aquí para jugar algunas rondas y demostrarme a mí mismo y a los demás que realmente puedo competir en uno o dos partidos. Tengo muchas ganas de ir a por el título”, sentenció el balcánico, campeón del torneo británico por última vez en 2022 y finalista en 2023, que entró en algunos detalles sobre cómo ha sido su recuperación. “Dedicamos una gran cantidad de horas en las últimas tres semanas diariamente a la rehabilitación, a los ejercicios, básicamente elevando el nivel de intensidad del entrenamiento todos los días. Por supuesto, siendo muy cautelosos con la rodilla y las reacciones. No he tenido ningún contratiempo. Si lo hubiera tenido, me preguntaría si debería estar aquí o no. Pero no ha sido así. ¿Por qué no intentarlo entonces?”.

Ensayos de alto nivel

Djokovic ha tenido una “muy buena semana de entrenamientos, con Sinner, Tiafoe, Medvedev, Ruusuvuori, y ayer, con Rune, jugadores realmente top, muy buenos en hierba y con alta intensidad”, destacó. “Supongo que hay muchas situaciones en la cancha en las que la rodilla se pone a prueba casi al máximo. Cambio de dirección, etcétera. Y ha respondido muy bien a todo eso hasta ahora, lo que por supuesto es una gran señal para mi participación en Wimbledon. Por eso decidí estar en el sorteo”, reiteró el ganador de 24 majors.

La ambición de Djokovic, que consultó con algunos deportistas que habían pasado por una situación parecida a la suya, como sus compañeros Taylor Fritz (que consiguió un milagro parecido al que está a punto de consumar ahora Novak) y Stan Wawrinka o la esquiadora Lindsey Vonn, le hará no escatimar esfuerzos en los primeros partidos que juegue. “Una vez que salgo a la pista, se trata de ganar y hacer todo lo posible que esté en mi mano para conseguirlo. No me veo conteniéndome ni calculando o siendo un poco más cauteloso en el movimiento. Voy a por todas, a tope, como he hecho durante toda mi carrera. Si no tuviera la sensación de que puedo hacer eso el martes, no estaría hablando hoy”. Ahora es más que probable que dentro de un par de días hable en la pista.

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