La lucha por el uno: ¿y ahora qué?

El duelo seguirá. En el corto y en el largo plazo. El domingo, tras superarle en la final del US Open, Carlos Alcaraz asestó un doble golpe a Jannik Sinner, dejándole sin el título neoyorquino y, además, arrebatándole el número uno del ranking ATP. El italiano, que llegó al trono en junio del año pasado, cedió la corona tras 65 semanas de reinado ininterrumpido. En concreto, 455 días. Ahora, con la intención de introducir cambios en su juego para recuperarse y ser todavía “mejor tenista”, tratará de recuperarlo. Hasta final de temporada, sin embargo, el escenario es favorable a su némesis. En lo que queda de año, Alcaraz defiende 1.000 puntos justos; Sinner, por su parte, deberá salvaguardar 2.830.

Concretamente, el español tiene en su cuenta los 500 puntos cosechados con el título de Pekín, un montante que no defenderá (esta vez, disputará el ATP 500 de Tokio), los 200 que logró como cuartofinalista del Masters 1.000 de Shanghái, los 100 relativos a los octavos de final del Masters 1.000 de París y los 200 que logró sumar con su única victoria en las ATP Finals del año pasado. El italiano, en cambio, como campeón en ambos torneos, acumula 1.000 puntos en Shanghái y 1.500 en la Copa de Maestros, además de 330 como finalista en Pekín (él sí tiene pensado repetir en el torneo y, por lo tanto, sólo podría sumar 170 créditos netos).

Una diferencia importante que, tras meses en los que Sinner se situaba como número uno holgado, invierte las tornas. De hecho, tras Wimbledon, el italiano gozaba de una ventaja de 3.430 puntos respecto a Alcaraz. El español, sin embargo, y consciente de que las matemáticas estaban de su lado, tenía claras sus intenciones. “Ahora mismo, mi objetivo es el mismo: ser feliz, disfrutar dentro y fuera de la pista en los mejores torneos del mundo. Y, obviamente, recuperar el primer puesto al final del año”, fueron las primeras palabras de Carlitos nada más pisar suelo estadounidense. Sus victorias en Cincinnati (sólo defendía 10 puntos) y en el US Open (sólo guardaba 50) aceleraron la reconquista.

Mirando un poquito más a lo lejos, ya en el inicio de la próxima temporada, Alcaraz también empezará el año con menos puntos por defender que Sinner. En el Open de Australia del presente curso, el italiano sumó 2.000 créditos como campeón y el español, que se despidió en cuartos, 400. La situación cambiará tras el Grand Slam oceánico. Jannik, durante los tres meses que aceptó como suspensión por su doble positivo en clostebol, se perdió Indian Wells, Miami, Montecarlo y Madrid, torneos en los que sólo sumará. Cuentas del futuro. Hasta entonces, la rivalidad, que de forma directa se reanudará en Shanghái, añadirá muchos más capítulos. Y a la gira asiática, de momento, Alcaraz llegará como número uno por primera vez en dos años.

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