Tsitsipas roza el naufragio, Díaz Acosta acaricia la gesta

Se le abría el cielo a Stefanos Tsitsipas en este Barcelona Open, con menos cabezas de serie que nunca para tratar de adjudicarse su primer título, después de las tres finales perdidas ante Rafa Nadal (2018 y 2021) y Carlos Alcaraz (2024). Diez ha disputado el heleno en torneos ATP 500 sin haber conseguido ganar ninguna. Es el momento. Sin embargo, no está siendo este Godó un camino de rosas para el reciente campeón del Masters 1000 de Montecarlo, que tuvo que irse hasta el ‘tie break’ del tercer set y sudar sangre ante un sorprendente Facundo Díaz Acosta para meterse en semifinales. Y para adjudicarse su novena victoria consecutiva, en el último encuentro de la historia del torneo arbitrado por Carlos Bernardes. Un partidazo.

Parecía mentira que para el argentino fuera su primer partido ante un top-10 mundial, pues a sus 23 años y a punto de entrar entre los 50 mejores por primera vez en su trayectoria, Díaz pronto rompió el servicio de Tsitsipas, en el tercer juego. Y, aunque el heleno se la devolvió, supo también encontrarle la debilidad en el revés para colocarse 4-5 y servir para adjudicarse ese primer set por 4-6. Se le vienen atragantando los zurdos al número 7 del mundo, y aun tratándose de un rival teóricamente menor, éste no fue menos.

Igual de sorprendentemente autoritario emprendió el sudamericano la segunda manga con su saque, realizando incluso un ‘ace’ y ganando en blanco dos servicios propios consecutivos. Pero Tsitsipas empezaba a calentar, como deseoso de resolver cuanto antes una batalla que ya se le estaba alargando sobremanera, sabedor de que para ganar tendría que irse a tres sets. Por eso rompió en el sexto juego para volar hacia el 6-3.

Se las prometía felices el griego en su remontada, sobre todo cuando enseguida aprovechó una de sus dos bolas de ‘break’ para situarse 2-1 y servicio a favor. Y, sin embargo, Díaz aguantó soberbio, concentradísimo, sosteniendo su firme saque y rompiendo el de un Tsitsipas que no entendía tanta igualdad, que se mantenía en el siguiente saque del ganador en Montecarlo, con un puntazo espectacular del argentino, que a punto estuvo de quebrarle de nuevo.

Pero el 4-4 dio alas a Tsitsipas y desequilibró a Díaz Acosta, que trató de continuar impasible e irredento como llevaba dos horas siéndolo, perdió sin embargo con su servicio un juego que se antojaba decisivo. Pero ya nada era lo que parecía. Y el griego, que lo tenía todo a su favor, sucumbió a la presión en el siguiente, con su saque, incurriendo en dobles faltas y en un error con su voraz derecha. 5-5 y un público ya volcado con el argentino. Que volvía a ganar solvente su saque.

Lo mismo esperaba conseguir Tsitsipas con el suyo para forzar, con un 6-6, el ‘tie break’. Y lo acabó alcanzando. Pero no hizo falta esperar a esa muerte súbita para vivir instantes taquicárdicos, con una bola de partido para Díaz que no logró aprovechar.

También con la miel en los labios se quedaba el porteño en ese ‘tie break’ en que cometió una importunísima doble falta con 3-5 favorable, lo que aliviaba a un Tsitsipas que se anotaba tres puntos seguidos para adjudicarse una pelota de partido. Pero fallaba. Y la tenía Díaz, que también la desdeñaba. Nadie quería ganar. De infarto, el partido más emocionante del torneo, se resolvía finalmente con un 10-8 en su tercera bola de partido para el favorito, que acaso ya no lo es tanto, pero que al menos puede resoplar aliviado.

Lajovic, también en tres sets

Se enfrentará Tsitsipas este sábado (no antes de las 16:00) precisamente con el semifinalista con el ránking más bajo (59º) desde que el propio heleno accediera a esta fase en 2018, siendo 63º del mundo. Dusan Lajovic, que ya se había cargado a dos cabezas de serie como Ugo Humbert y el español Alejandro Davidovich, hizo valer su veteranía para imponerse a Arthur Fils, de 19 años, quien el día después de eliminar a Álex de Miñaur amenizó otro partido que se fue a tres sets.

Con nocturnidad, y una imagen más propia de una Copa de Maestros o de cualquier torneo que se juegue bajo techo, con la grada a oscuras y la pista totalmente eliminada, el serbio se aprovechó de dos bolas de rotura con 4-4 en el primer set para llevárselo (6-4). Pero Fils se repuso en el segundo, buscando también romper en varias ocasiones el servicio de su rival hasta conseguirlo en el 2-5, y así hacer bajada hasta el 3-6.

Muy bonito fue el arranque del definitivo set, con intercambio de golpes y de puños en alto, con Lajovic devolviendo golpes casi inalcanzables y un Fils demasiado errático, que recurría al consejo de su entrenador, Sergi Bruguera. En el sexto juego, el balcánico rompía el servicio (4-2) y se acercaba a una victoria que el galo no regaló ni mucho menos. Tres bolas de partido tuvo Lajovic en el saque de Fils hasta que logró el definitivo 6-2. De la semifinal entre Casper Ruud y Tomás Martín Etcheverry saldrá el otro finalista del Barcelona Open.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.