Davidovich cumple ante Van Assche; Carballés no puede con Tsitsipas y Bautista se hunde

Alejandro Davidovich es el único español que acompañará a Carlos Alcaraz en la tercera ronda de Roland Garros. El malagueño sobrevivió con holgura para volver a competir en el Grand Slam francés el próximo viernes, con un triunfo en tres sets (6-4, 6-3 y 7-6 (6) en 2h35) ante el local Luca van Assche en la pista trampa, la 14, a la que llaman ‘la de los franceses’. Davidovich, cuartofinalista en 2021, supera el segundo escollo del torneo por segunda vez en cinco participaciones y se enfrentará a Novak Djokovic, ya que el serbio supeó al húngaro Marton Fucsovics este miércoles en la sesión nocturna de la Philippe Chatrier (7-6 (2), 6-0 y 6-3).

Alex ganó a Van Assche hace unas semanas en octavos de Estoril sin ceder un set y volvió a dominar en París al prometedor joven de 19 años y 82º del mundo, sobrecogido por la presión de jugar antes sus paisanos en el evento más importante de su país. En ese sentido, la experiencia favoreció a Davidovich, que manejó la situación con una agresividad controlada y solo perdió su servicio en una ocasión. “Estoy jugando a buen nivel, llevo dos partidos con muy buena calma bueno, a un nivel que me está gustando, mental y físicamente. Estoy muy bien, con ganas de seguir dando ese nivel otro partido más”, dijo Alejandro.

Tsitsipas domina a Carballés

Para desgracia de Roberto Carballés, Stefanos Tsitsipas, finalista de Roland Garros en 2021, se puso serio este miércoles y disipó las dudas que había generado su juego el lunes, cuando sufrió para deshacerse en cuatro sets del checo Jiri Vesely. El griego, aspirante a número uno si sale campeón en París, venció al español por 6-3, 7-6 (4) y 6-2 en 2h16, y suma 20 victorias en el torneo (20-6). El viernes se enfrentará en la tercera ronda, que alcanza por quinto año consecutivo, al argentino Diego Schwartzman.

Carballés sigue sin poder ganar a un top-10. Su marca en Grand Slams asciende a 0-4 (0-12 en el circuito). Hace cinco años que no se enfrentaba a Tsitsipas, que le venció en cuartos de Estoril en 2018. No era fácil su intento de alcanzar por segunda vez el tercer escalón en el Bosque de Bolonia, como logró en 2020. Aunque en el segundo set tuvo oportunidades de igualar el encuentro, que se le escaparon en el desempate. También protagonizó un momento involuntariamente cómico cuando, por culpa del sol, no acertó a rematar una bola que le llegaba franca.

El saque y la agresividad (46 golpes ganadores) le dieron buenos réditos a Stefanos, que se atrevió a decir unas palabras en francés para agradecerle al público su presencia. Después dijo que “no es fácil olvidar que se supone que esto es divertido, por todo el trabajo y el sufrimiento que hay detrás”, refiriéndose a jugar al tenis, en relación con lo que expresó Carlos Alcaraz el lunes tras ganar a Cobolli.

Bautista tira dos sets de ventaja

Está claro que 2023 no es el año de Roberto Bautista. Después de un debut esperanzador el lunes contra chino Yibing Wu, al que ganó en tres sets, el castellonense se despidió en la segunda ronda ante un rival inferior, Juan Pablo Varillas. El peruano de 27 años y 94º del mundo aprovechó las dudas de Rober para remontar una desventaja de dos sets y terminar pasando por encima de él: 1-6, 4-6, 6-3, 6-1 y 6-1 en 3h52. No había ganado un partido de Grand Slam hasta que se presentó este año por segunda vez en Roland Garros y ahora está en la tercera ronda, en la que le espera el polaco Hubert Hurkacz.

Bautista cometió muchos errores (54), algo poco habitual en él y perdió bastantes puntos con su saque, algo que le ocurre más a menudo. Esa combinación le hizo perder un encuentro que parecía tener controlado tras apuntarse las dos primeras mangas ante un oponente que había remontado la misma desventaja en la primera ronda contra el chino Juncheng Shang. Roberto, que ya había perdido antes con Varillas, en octavos de Gstaad, hace un año, no gana dos partidos seguidos desde que alcanzó la cuarta ronda en el Open de Australia.