Queen’s y Wimbledon, en el calendario más próximo de Alcaraz
Tras caer en semifinales de Roland Garros ante Djokovic, el murciano pone fin a la campaña de tierra para afrontar la de hierba en Gran Bretaña.
Después de perder el viernes en las semifinales de Roland Garros contra Novak Djokovic, Carlos Alcaraz vuelve a casa para descansar unos días antes de que él y su equipo, liderado por su entrenador, Juan Carlos Ferrero, decida cuál será el siguiente paso en la carrera del murciano de 20 años.
La campaña de tierra ya es historia para él. La terminó con el mejor balance del circuito, 25-3, y tres títulos, en Buenos Aires, Barcelona y Madrid. Ahora afrontará la de hierba. Su nombre aparece en la lista de jugadores del ATP 500 de Queen’s (16 al 25 de junio), donde también jugarán, entre otros, Holger Rune, Taylor Fritz, Matteo Berrettini, Andy Murray y los españoles Alejandro Davidovich, Bernabé Zapata y Roberto Carballés (en la previa).
La duda es si Carlitos descansará para recuperarse bien de sus problemas físicos y afrontar con mayores garantías su participación en Wimbledon (3 al 16 de julio), un Grand Slam que le ilusiona.
Cinco percances en siete meses
Desde el pasado mes de noviembre, cuando se retiró por un desgarro abdominal en los cuartos de final del Masters 1.000 de París curando jugaba contra Holger Rune, ha tenido cuatro percances físicos de mayor o menor gravedad. Aquella lesión le impidió participar en las ATP Finals y en las Finales de la Copa Davis. Poco antes de viajar a Australia para participar en el Grand Slam oceánico, en enero, se hizo daño durante un entrenamiento en la Academia JC Ferrero Equelite en el músculo semimembranoso de la pierna derecha Y fue baja hasta que reapareció en Buenos Aires. Fue campeón allí y la semana siguiente, durante la final del ATP 500 de Río de Janeiro, contra Camerón Norrie, una distensión en el músculo isquiotibial derecho le apartó del título y del torneo de Acapulco. En abril, no pudo acudir a Montecarlo por culpa de una artritis postraumática en la mano izquierda y molestias musculares en la columna. En Roland Garros, los calambres le impidieron competir al 100% contra Djokovic.