Djokovic sobrevive... pero con problemas: “Estoy preocupado”
El serbio, que tuvo que ser atendido por sus molestias en el muslo izquierdo, ganó al francés Couacaud y se enfrentará al búlgaro Dimitrov.
“Tuve que pedir tiempo muerto médico y estuve sufriendo un poco, pero respondí bien en el tercer set y especialmente en el cuarto”, dijo Novak Djokovic, cabizbajo y con cara de pocos amigos en la entrevista posterior a su victoria contra Enzo Couacaud. El serbio acusó las molestias que arrastra en el muslo izquierdo y durante el segundo set del partido exteriorizó el dolor que le producen con gestos muy parecidos a los que hizo Rafa Nadal el miércoles, cuando se lesionó en el partido que perdió contra el estadounidense Mackenzie McDonald. Pero, al contrario que el español, él se las arregló para sobrevivir y vencer por 6-1, 6-7 (5), 6-2 y 6-0 tras dos horas y 31 de calvario.
De ese modo, pasó a la tercera ronda del Open de Australia por 15ª vez en 18 participaciones, y el sábado se enfrentará al búlgaro Grigor Dimitrov, que pasó con victoria contundente por 6-3, 6-2 y 6-0 ante otro serbio, Laslo Djere. Djokovic domina el cara a cara por 9-1. “Estoy contento de haber logrado ganar el partido en cuatro sets, porque pasaron muchas cosas. Pero mi situación no es la ideal, me gustaría que las cosas fueran diferentes, sentirme de otra manera con la pierna, pero son como son. Afortunadamente, en los Grand Slams hay días sin partidos y hay algo de tiempo para recuperarse y prepararse para el siguiente partido. Básicamente, no me estoy entrenando en los días de descanso para que la pierna está en un estado de alguna manera ideal para competir al máximo nivel”, dijo Nole, quien reconoce estar “preocupado”. “Y tengo razones, pero al mismo tiempo trató de aceptar las circunstancias y con mi equipo, el fisio, trataremos de buscar soluciones para poder jugar todos los partidos. Hay dos opciones, dejarlo o continuar. Voy a intentarlo contra un rival como Dimitrov”.
No fue fácil para él superar al número 190º del mundo, de 27 años, que venía de jugar la previa y solo había disputado antes tres Grand Slams. Porque el galo, que casi se lesiona (tobillo derecho) en el primer set, jugó son complejos y con valentía ante el cuarto favorito y nueve veces campeón.
Molesto con un espectador
“Hace dos años tuve problemas parecidos en Australia, en un músculo diferente (el abdominal), y conseguí superarlo y ganar el torneo. Ahora es diferente, porque no sé cómo va a reaccionar mi cuerpo. Espero que de la mejor manera, con positivismo, para ir día a día y ver cómo va la cosa”, reconoce el de Belgrado, que se llevó la segunda manga en el desempate y eso enfadó a Djokovic, que pidió al juez de silla que echara a un espectador que le había estado increpando desde el inicio del partido. Eso demuestra que en realidad no hay unanimidad a la hora de celebrar su presencia en Melbourne. “El tipo estaba borracho hasta la saciedad. Desde el primer momento me estuvo provocando. No estaba aquí para ver tenis, solo quería meterse en mi cabeza. Me insultaba y me provocaba, sin ningún respeto, y dije basta, porque tengo un límite que él cruzó, por eso le dije al juez de silla si iba a hacer algo o no”, explicó. Claramente, Djokovic no está contento.