Alcaraz topa con Musetti
El italiano, de 20 años, tumba al español que aspiraba a un quinto título este año. Carlitos levanta cinco bolas de partido, pero no puede con la sexta. Aun así, sube al quinto puesto del ranking.
Lorenzo Musetti reveló (como era previsible pero había que confirmarlo) que Carlos Alcaraz no es infalible. El murciano se presentó en la final del ATP 500 de Hamburgo con aura de invencible, después de los cinco títulos en cinco finales (cuatro este año) que llevaba cosechados hasta hoy. Pero se enredó en la maraña del habilidoso juego del italiano para caer por 6-4, 6-7 (6) y 6-4 en 2h:46. Aun así, aparecerá mañana como número cinco del mundo, subiendo un escalón en la tabla.
Río, Miami, Barcelona y Madrid eran las plazas donde Charly, de 19 años, había alzado los trofeos este curso. En la tierra del coqueto Am Rothenbaum se anunciaba otro previsible día de gloria para el murciano. Sin embargo, otro tenista llegado del futuro frenó la marcha del primer cabeza de serie. Musetti, a sus 20 años, conquistó su primer título ATP y habrá que contar con él. Tiene descaro y mano.
El de Carrara (62º del mundo) lanzó andanadas de bolas altas con su revés a una mano que cortocircuitaron los planes del español. Incapaz de resolver el entuerto, con sólo tres golpes ganadores, negado para imprimir velocidad a sus tiros, a Alcaraz se le escapó el primer set... y el primer juego del segundo en el que encajó un break.
Musetti crecía y Alcaraz menguaba. El transalpino sacaba ya para ganar con 5-4 y una jugada prendió el fuego interior de Carlitos. La jueza Aurelie Tourte dio por buena la devolución de una dejada en la que la bola botó dos veces antes de que la conectara el italiano quien, antideportivo, se hizo el sueco y significó el 15 iguales. Noqueado, el murciano se precipitó hacia las dos primeras bolas de partido. Con orgullo de campeón, escapó de las cuerdas tirando golpes: rotura y al tie-break. Un desempate en el que comenzó 3-1, pero en el que tuvo que hacer frente a otras tres bolas de partido. Con cojones, corazón y cabeza (la fórmula de su abuelo Carlos), también las levantó.
Demasiado tiempo en el filo llevaba Alcaraz. Y Musetti, pese a no poder cerrar el partido, no se arrugó. Fue de menos a más en la manga definitiva. Tuvo ya una bola de break con 3-2. El octavo juego se puso durísimo, con puntos espectaculares. Y en el décimo llegó la sexta bola de partido para el italiano. Esta vez al resto. Sin la presión de tener que abrochar con su saque, fue Carlitos el que tiró la derecha fuera.
Musetti (62º) entra así entre los cuarenta primeros del mundo. Mucho más arriba, quinto, está ya Alcaraz, que no pudo igualar a Ernest Gulbis y Martin Klizan como los únicos jugadores en la Era Open en ganar sus seis primeras finales consecutivas. Tampoco pudo inscribir su nombre en el palmarés de Hamburgo, un torneo muy ‘español’ por los triunfos desde 1972 de Manolo Orantes, Pepe Higueras, Juan Aguilera, Roberto Carretero, Albert Costa, Albert Portas, Tommy Robredo, Rafa Nadal y Pablo Carreño. Tiempo tiene por delante.