Garbiñe Muguruza: “Los tenistas no estamos preparados para la retirada”
La exjugadora atiende a AS después de ser nombrada codirectora del Madrid Open. “El tenis español no está tan mal, yo lo veo muy saludable”.


Han pasado casi dos años desde que Garbiñe Muguruza (Guatire, Venezuela, 32 años) anunciase su retirada definitiva como tenista profesional, pero lo cierto es que, desde entonces, la exnúmero uno no ha dejado nunca de estar vinculada a este deporte. Comentarista de Tennis Channel o directora de las WTA Finals, la española se embarca ahora en un nuevo desafío notable, el de ser codirectora del Madrid Open junto con Feliciano López. Garbiñe, que también está esperando el nacimiento de su primer hijo, atiende desde Ginebra a AS para hablar sobre este nuevo proyecto en su vida y, en general, sobre todo lo que rodea al deporte que le hizo ser campeona de Wimbledon y Roland Garros, entre otros muchos méritos.
¿Cómo surge el ser directora del Madrid Open? Me imagino que muy emocionada con ello.
Muy, muy emocionada, sí. Surge hace poco, la verdad. Es un torneo muy pionero en igualdad de prize money, de intentar elevar siempre el torneo lo máximo posible. Y bueno, surgió la idea de intentar ser pioneros en también tener dos directores. Es un torneo muy grande. Hay mucho ajetreo, entonces es bueno tener dos directores para ATP y WTA. Pero muy contenta, es una oportunidad muy bonita de complementarme con Feli, de ayudar al torneo. Y bueno, inesperada, porque es superpronto, hace dos años estaba jugando, me he retirado hace poquísimo. Y ya estar en este rol, que siempre soñé, porque es un torneo que no sé cuántas veces habré jugado, es el único que tenemos para las chicas en España... Entonces es muy importante. Y ahora digamos que hago esa transición a formar parte del torneo en oficina, ¿no? Pero es supermotivante tener este cargo.
¿Y cómo va a ser ese rol suyo? Además, con la peculiaridad de que comparte el cargo con Feliciano.
Bueno, eso tenemos que aprender a gestionarlo, porque es que nunca ha habido esa situación, en verdad, dos codirectores. Pero yo creo que va a ser estupendo porque nos podemos repartir el trabajo, ayudarnos mutuamente... Seguro que Feli me ayudará muchísimo para aprender cómo se lleva un torneo de tal magnitud. Claro, yo vengo ya siendo directora dos años de la WTA Finals, pero es un torneo más pequeñito. Además, él y yo nos llevamos muy bien. Vamos a aliviar la presión de trabajo. Podremos cada uno también tener esa parte, esa mochila que podemos llevar cada uno. Yo sé que va a salir bien, ya lo sé.
Usted que conoce muy bien el torneo, ¿con qué deberes o qué tareas pendientes llega al cargo?
Lo que primero se me viene a la cabeza es cuidar a mis chicas. Que sientan que Madrid es un torneo, que es el mejor WTA 1.000. Claro, cuando yo era jugadora quería que a mí me traten bien. Quería sentirme querida, apreciada. Y yo quiero que ellas sientan eso en el Madrid Open. Que lleguen y digan ‘este torneo está muy bien, me tratan excelente, me cuidan, están atentas’. Entonces lo primero para mí es eso, asegurarme que las jugadoras tienen el mejor servicio, experiencia y atenciones.
No deja de ser paradójico que ha dicho muchas veces que este torneo es su espina clavada como jugadora.
Ay, sí, sí. La verdad que el otro día pensé y dije que qué lástima no haber podido llegar al final del torneo. No ganarlo ya, sino no quedarme en esas terceras, cuartas rondas, que nunca conseguí por la presión que me ponía yo misma. Decía que aquí tenía que brillar, que conseguir sacar mi mejor tenis. Y eso es un arma de doble filo, porque muchas veces cuando uno piensa así, cuidado. Pero bueno, pues ahora tengo este nuevo rol donde puedo contribuir. Pero sí, ojalá hubiese jugado mejor, pero mira, ahora ha llegado esta oportunidad donde puedo cambiar eso.
¿Cambia algo la llegada del grupo inversor MARI?
Yo creo que en el tema de management no va a cambiar mucho la operatividad del torneo, la gente que está día a día, a pie de torneo con el mismo equipo. No lo sé, apenas ya te digo, estoy aprendiendo ahora las entrañas un poco del torneo, me estoy empapando un poco cada día más y más. Así que veremos, a ver, no creo que cambie mucho, la verdad.
Hace no tanto que anunciaba su retirada en Cibeles, y desde entonces no ha parado. Comentarista, directora de WTA Finals, ahora de este torneo, va a ser madre.
Pues la verdad que no me esperaba después de retirarme hace tan poco estar tan involucrada. No solo involucrada, sino con mucha responsabilidad. Pero es una alegría que la gente ponga su confianza en mí, en mi capacidad de trabajo. Muy contenta, la verdad es que se me vienen muchas cosas al mismo tiempo, sobre todo con el tema de la maternidad. Pero es un reto, yo creo que son oportunidades fantásticas. La maternidad también es un momento bonito. El 2026 va a ser realmente mágico. Un reto también, hay que decirlo, porque son muchas cosas. Pero el tenis me ha devuelto. Yo he intentado decir, bueno, mira, me retiro. Pero no, te queremos de vuelta en otro rol. Y como al final está en mi ADN, no podría estar más feliz de que me quieran en el mundo del tenis.
¿Por qué cree que se ha ganado la confianza de todo el mundo?
Bueno, eso tendrían que decirlo ellos, ¿no? Pero bueno, al final, toda la vida vengo del tenis. Desde que tengo uso de razón, de memoria, de todo. Es lo que más sé, lo que más conozco. Obviamente hay muchísimas cosas que he de aprender a nivel de management. Pero digamos que está en mi sangre el saber un poco cómo funciona el mundo del tenis. Leer bien a las jugadoras. Yo creo que cuando me ven, también sienten como que hay una persona cercana. Ellas me ven quizá menos corporativa. Al final pueden hablar conmigo. Siento que hay una relación más fácil, menos brusca, más fluida. En el fondo, siempre soy jugadora. Entonces yo creo que es muy fluido estar presente en los torneos y hacer mi trabajo.
Es usted un gran ejemplo de la transición en la retirada. ¿Reciben los jugadores suficiente información para dar este paso?
No, no, no. Es muy importante lo que has dicho. Es una gran pregunta porque yo también, antes de retirarme, uno tiene esa duda, ¿no? ¿Qué habrá más allá del tenis? ¿Cómo gestionaré? ¿Qué oportunidades me vendrán? La verdad que muchas veces he hablado con jugadoras: ‘Oye, cuéntame cómo sentiste esto. ¿Qué fue lo que no sé qué?’ Cositas así importantes que no es fácil abrirte y encontrar a alguien con quien poder charlar y conversar. No estamos muy preparados para dar ese paso porque como es tan inmersiva la vida del tenis, es un poco como que el día que no juegue ya pensaré. Pero mientras juegas, no puedes pensar. Es complicado. Hay gente que tiene realmente un interés muy fuerte. Decir, no, es que a mí me apasionan los videojuegos, y después quiero dedicarme a ello. Pero en general es difícil averiguar tus gustos. ¿Qué voy a hacer? ¿En qué seré buena? Entonces es difícil, es difícil. Yo he sido muy afortunada de que esas oportunidades han venido muy rápido. Y me encantan.
En ocasiones, ¿cree que está viniendo todo demasiado rápido?
No, ¿sabes qué? Yo creo que todo pasa por algo. ¿Rápido o no rápido? Claro que es rápido, pero creo que es positivo. Nunca he pensado que hacer cosas que te gustan, u oportunidades, vengan más pronto de lo que pensabas. Yo creo que eso es excelente. Nunca lo vería como algo negativo. Entonces, ya te digo, va a ser un reto el 2026. Pero tendré mucha ayuda. Todo el mundo sabe que va a ser un reto. Entonces estoy muy bien apoyada y eso da mucha tranquilidad.
¿Qué le queda pendiente por hacer? ¿Capitana de la Selección, por ejemplo?
Ah, eso sí, me encantaría. Carla (Suárez) está ahora en el puesto. La verdad que lo está haciendo estupendamente. Han llegado a las finales este año en Shenzhen. Es un cargo muy bonito, es un honor. Es un cargo de honor que te consideren como la capitana del país. Me encantaría, llegado a su momento, lógicamente. Pero no sé qué vendría más allá. El otro día me preguntaron si quería ser entrenadora. Eso es algo que quizás más adelante, porque eso ya es más complicado. Pero el mundo del tenis en general es muy bonito y hay muchos pasos y facetas, tanto en pista como fuera de pista. Entonces estoy un poco haciendo de todo. Entonces, esperemos a ver a dónde me lleva todo esto.
Llama la atención la pasión con la que habla del tenis. ¿Siempre ha sido así su relación con este deporte o en ocasiones le ha cargado demasiado?
Ha habido de todo, claro. Ha habido momentos duros. El deporte se basa mucho en resultados y en emociones. Cuando las cosas no van bien, he perdido, he bajado de ranking y eso, uno pasa un bache y cuesta. Pero en general yo siempre he sido muy apasionada porque me he dedicado a algo que me gusta. Es una vida muy bonita, la vida del deporte. Corta, intensa, pero muy bonita por todo lo que ofrece. Y más, si encima triunfas. Ya es la bomba. Obviamente ahora, como no estoy entrenando y tal, veo mucho más tenis en la televisión que antes. Antes era como que no me pongas más tenis que llevo en pista seis horas. Pero ahora veo mucho, sigo mucho a las jugadoras, hablo con ellas, veo la tele, estoy al día lo máximo posible. Y antes cuando jugaba intentabas, ostras, este es mi momento de descanso, voy a desconectar. Pero siempre, siempre he sido muy apasionada.
Estuvo Rafa Nadal un año sin coger una raqueta tras retirarse... ¿A usted le pasó lo mismo?
A ver, yo entiendo a Rafa, normal que haya querido descansar. Que diga, sabes qué, voy a recuperar mi cuerpo, voy a estar con mi familia, y que se anime a jugar pasado un tiempo. Todo el mundo necesita un poquito de detox. Sí he jugado, la verdad, un par de veces. También con niños, clínics y cosas así. Pero en serio, en serio, creo que una vez, tampoco mucho más.
¿Y qué tal fue? ¿Se le pasó por la cabeza algo como lo que se rumorea ahora con Serena?
(Se ríe) Bien, bien, pero obviamente no estás en forma como estabas en el día a día. Entonces dices, yo creo que mejor me voy a parar. Bueno, es normal, sí. Voy jugando, voy manteniéndome en forma. Y lo de Serena Williams, wow, pues no sé qué decirte. Es sorprendente. Pero bueno, ella luego creo que dijo que no iba a volver. Nos tiene un poco desconcertados a todos. Pero bueno, que si quieren hacernos una retirada a lo grande en Madrid, no diremos que no, ¿no?
¿Qué le parecen propuestas como la Batalla de los Sexos que van a jugar Sabalenka y Kyrgios?
Bueno, a ver. Yo creo que este approach en esta edición de la Batalla de los Sexos no tiene nada que ver quizá con la anterior. Este es un poco más de diversión, de vamos a hacerlo un poco gracioso. Un poco por lo que he visto entre Kyrgios y Sabalenka, cómo se lo están tomando. No es algo muy serio. Les veo muy relajados, un poco todo como chiste, broma. Me parece bien porque al final eso entretiene mucho a los fans. Hace que el deporte del tenis que ya es superpopular entre las chicas. ¿Has visto la lista de Forbes? 10 de las 15 mejor pagadas son tenistas. Entonces que haya cosas así que a los fans les guste, todo el mundo va a ver el partido, todo el mundo quiere saber, está bien, es divertido. No doy nada negativo al respecto, claro.
¿Qué va a querer ver en pista en 2026?
Muchas cosas. En la parte de la WTA estamos viendo muchas jugadoras diferentes ganar los cuatro Grand Slams. El año pasado lo ganaron cuatro diferentes. Tengo mucha curiosidad de ver este año. ¿Qué va a pasar? ¿Cómo va a estar Aryna Sabalenka e Iga (Swiatek)? ¿Cómo van a estar las nuevas jugadoras que este año han llegado al Torneo de las Maestras? Anisimova, Mirra Andreeva también. Chicas nuevas y también de diferentes países. Hemos visto a Victoria Mboko, una canadiense de 18 años, ganar en casa. Eso es dificilísimo. Alexandra Eala, de Filipinas. O sea, increíble. Entonces, hay historias bonitas que quiero estar pendiente de seguir a ver cómo arranca el año. Bueno, también Carlitos, ¿no? A ver si consigue ese Australian Open, que es el que le falta. Habrá que ir viendo durante el año esa rivalidad entre Sinner y Alcaraz. ¿A ver si hay un tercero? A ver si de repente sale alguien que les puede retar esa rivalidad tan fuerte con la que están tan por encima de todos. Quién sabe.
¿Cómo ve todo el ruido que se genera cada vez que pierde Alcaraz un partido?
Es que pierde tan poco... Es que cuando pierde, claro, es como... Yo no sé, ganó ocho torneos este año. Pierde tan poco que cuando pierde es como ‘qué ha pasado’. Es normal en alguien con tanta expectativa, presión, que gana tanto. Es normal que el día que no te salgan las cosas... No está quizá tan familiarizado con la derrota como otros jugadores y con eso, claro, estás dos días cruzado. Pero es un buen problema. Aunque se enfade el día que pierda, porque pierde tan poco que no pasa nada.
¿Se atreve a predecir los ganadores de los majors el año que viene?
(Suspira y se ríe) Ya sabes que es imposible decirlo. En diciembre es imposible. Hombre, lo único que te puedo decir ahora son los jugadores top. Hasta que no vea un poco quién arranca el año y dices, ostras, este ha hecho una buena pretemporada y le veo fuerte, con confianza... Ahora mismo tengo que decirte Sabalenka, Sinner, Carlos... No puedo decir otras cosa.
En clave WTA española, Badosa aspira a volver a estar arriba y Bouzas sigue creciendo. ¿Qué espera de ellas?
Pues he estado siguiendo un poquito a Paula por las redes, pude hablar con ella un poco. La veo entrenando mucho, mucho. Una pretemporada superlarga, superfuerte. Ojalá de verdad que el cuerpo se le arregle, esos dolores que tiene, que se ponga fuerte y que consiga arrancar una temporada buena, sobre todo al inicio, para que eso le dé inercia, que empiece bien. Además ella jugó muy bien el año pasado en Australia, entonces arranca también con ese poco de presión. Pero vamos, estoy ansiosa por ver que arranca bien y sana. Y Jessica, este año ha sido una irrupción. Ha jugado partidos muy buenos, ha ganado partidos muy buenos y nos ha demostrado que tiene tenis. Ahora, claro, hay que demostrarlo más, pero ya ha atravesado esa barrera de aquí estoy. Para este 2026 creo que se viene un buen año de Jessica. Yo creo que ya ha perdido ese miedo y ya sabe que forma parte de las top 100-50. Ahora ya puede incluso ganar un WTA el año que viene, la veo perfectamente capacitada.
Cada vez hay menos españolas en el top-100, y mientras los chicos tienen una cantera que apunta maneras, no es similar en ellas. ¿Cómo lo explica?
Sí, la verdad es que no sé cómo explicarlo, es un poco misterio. Va a rachas. En la época de Conchita y Arancha, eran muy fuertes en mujeres, luego vienen los hombres y hubo una época de hombres tan buena con Rafa Nadal, que es como que era inigualable. Y luego hasta hace poco también estábamos Paula y yo en el top-10, era como jolín, dos españolas en el top-10. También estamos un poco malacostumbrados, es como que nunca es suficiente. Yo veo el tenis español muy saludable, veo a tres o cuatro jugadoras ahora metidas en el top-100, chicos quizá hay algo más, pero bueno, no estamos mal, no estamos mal. ¿Qué puede ser mejor? Sí, pero yo sería positiva y seguir trabajando porque saldrán. Al final en España siempre va a haber tenistas, porque la escuela es muy buena.
La última. ¿Qué le pide a 2026?
Salud, salud para lo que se viene, para mí, para mi familia. Un viaje bonito, cosas nuevas me van a llegar. Entonces, saber manejar todo lo mejor posible, intentar encajar todo bien, tener buena salud, no sé, yo creo que es lo básico (con una sonrisa).
Noticias relacionadas
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp.
¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí

Rellene su nombre y apellidos para comentar