Djokovic vuelve a EE UU

“A lo largo de mi vida, realmente he desarrollado este tipo de mentalidad de no mirar hacia atrás con arrepentimiento por las cosas. No me arrepiento de la razón por la que no estuve aquí durante dos años. Estoy contento de estar de vuelta. He tenido mucho éxito en suelo estadounidense”. Con esa claridad se expresó Novak Djokovic en la rueda de prensa previa a su participación en el Masters 1.000 de Cincinnati, que marca su regreso a Estados Unidos.

El serbio, que por su negativa a vacunarse contra el coronavirus no ha competido en el país norteamericano desde la final del US Open 2021, que perdió contra Daniil Medvedev, volverá a jugar en la madrugada del miércoles al jueves (01:00, Movistar+) en individuales (el martes jugó y perdió en dobles con su compatriota Cacic, ante Jamie Murray y Michael Venus) ante Alejandro Davidovich. El español, que ganó por un doble 6-3 al argentino Etcheverry, está en forma y será un rival duro. También compitió por parejas en la tercera jornada, junto a Stefanos Tsitsipas y también perdieron.

La última vez que Djokovic disputó el Western & Southern Open fue en 2020, aunque aquel año, por la pandemia, el torneo tuvo lugar en la burbuja de Nueva York, y allí se proclamó campeón. El balcánico no había estado en Cincinnati desde 2019. En 2022, EE UU endureció su política sanitaria, impidiendo la entrada a sus territorios de las personas sin vacunar. Por eso el ganador de 23 Grand Slams se perdió los dos últimos Masters 1.000 de Indian Wells y Miami, y el año pasado el de Cincinnati; también el US Open, con una pérdida de 1.200 puntos. El pasado mes de mayo, el Gobierno estadounidense levantó la restricción anti-COVID y a Djokovic se le abrieron de nuevo las puertas para competir allí esta semana y dentro de dos en Nueva York, en el último Grand Slam del curso.

Expectación

Su primer entrenamiento en el Lindner Family Tennis Center generó mucha expectación. “Parecía un partido. Estoy muy agradecido por la presencia de tanta gente”, dijo Novak, que no jugaba desde la final de Wimbledon que perdió contra Carlos Alcaraz. “Lo superé en un día. Necesitaba un buen descanso después y algo de tiempo con mi familia, y eso fue lo que hice”. Ahora vuelve dispuesto a plantar cara al español y retrasar así lo más posible el inevitable cambio de ciclo.