Sabalenka cae por primera vez en 2023 tras ganar 6-0 el primer set

Hasta aquí. La racha de Aryna Sabalenka, número dos del mundo e invicta en 2023, ha llegado a su fin. La bielorrusa, que acumulaba 13 victorias seguidas, ha caído hoy en cuartos de final del WTA 1.000 de Dubái ante la checa Barbora Krejcikova (30ª), que se medirá con Jessica Pegula (3ª) en semifinales. La estadounidense, por su parte, no tuvo ni que jugar para avanzar; Karolina Muchova (112ª), su rival, no llegó a saltar a la pista debido a una lesión abdominal. Por el camino, Sabalenka, que cerró 2022 cayendo en la final de la Copa de Maestras, había logrado los títulos de Adelaida y el Open de Australia, su primer Slam. Por el camino, también, sólo había cedido dos sets (27-2). Este jueves, tras ganar con un rosco el primer parcial, terminaba perdiendo ese mismo número de asaltos ante Krejcikova (0-6, 7-6(2) y 6-1). Coco Gauff (5ª), vencedora (6-2 y 7-5) en un derbi estadounidense ante Madison Keys (23ª), y la indomable Iga Swiatek (1ª) buscarán la final por el otro lado del cuadro.

“Realmente, no hay mucho que puedas cambiar, porque ella juega bien, sirve bien y golpea muy fuerte. Sólo traté de alcanzar su ritmo. No sé, tal vez ser un poco más agresiva, porque, de lo contrario, es muy difícil”, decía Krejcikova en el intento de darle una explicación a su remontada. En el segundo set, tras ceder el primero en sólo 30 minutos, llegó a verse 1-3 abajo en el marcador. A partir de ese momento, empezó a castigar los segundos servicios de la bielorrusa, que multiplicó sus errores no forzados e incluso llegó a encadenar dos dobles faltas, ya para el 4-1 del tercer parcial. La checa, “más relajada” tras conseguir su primera rotura del partido, empezó a sumar ganadores a su contador (lleva 108 en el torneo, la que más) y a acelerar hacia su primera victoria frente a Aryna, tan expresiva como siempre. Esta vez, para mostrar su desesperación con el avance del partido... y de sus desaciertos.

Gauff, ante un muro imposible

Tras superar a Keys de forma solvente, asoman los fantasmas. En sus cinco enfrentamientos hasta el momento, Gauff no ha podido sumar ningún set ante Swiatek, de nuevo en trance. “Ella está jugando a su mejor nivel. Va a ser un desafío. Pero, para ser honestos, creo que es un buen enfrentamiento para ver hasta dónde puedo mejorar. Tienes que creer que puedes ganar incluso cuando las probabilidades parecen estar en tu contra”, reflexionaba Coco tras alcanzar las semifinales, las primeras para una jugadora de menos de 19 años, desde 2009, en un WTA 1.000. Consistente con su derecha y su servicio ante Keys, se medirá con una jugadora, la número uno, que consiguió el título de Doha cediendo sólo cinco juegos y que, en Dubái, sólo se ha dejado otros tres por el camino. Un muro, hasta el momento, imposible.