Ruud salva la papeleta en una Laver con dominio americano
El equipo entrenado por Björn Borg no puede permitirse más fallos. Tendrá que vencer todos sus partidos para ganar esta competición.
Sin margen de error. El equipo europeo vuelve a ver como su rival pasa por encima tras una jornada decepcionante en la que únicamente Casper Ruud dio la cara y consiguió los primeros puntos para el conjunto entrenado por Björn Borg que antes del último día de competición de la Laver Cup se sitúa muy por detrás. Las cuentas son claras. Europa necesita ganar los cuatro partidos mientras que el combinado del resto del mundo únicamente tiene que ganar uno de los encuentros. Improbable tras el desempeño de los dos primeros días, pero no imposible.
El segundo día de competición, lo iniciaron los tenistas mejor posicionados de cada equipo en el ranking de la ATP. Andrey Rublev, 6º, y Taylor Fritz, 8º, se enfrentaban en octava ocasión en un encuentro dominado por el tenista estadounidense. Se mostró muy sólido en el primer set y supo remontar y rematar la faena en la segunda manga para derrotar al ruso por 6-2 y 7-6 (3) en una hora y 32 minutos para seguir poniendo tierra de por medio.
Casper Ruud, 9º, y Tommy Paul, 13º, fueron los siguientes en saltar a la pista. El noruego pasó por encima del estadounidense en un encuentro en el que salvó una bola de set en el primer parcial. Tuvo idéntico resultado que el anterior partido. Sin embargo, cambió el equipo ganador. Ruud se impuso a Paul por 7-6 (6) y 6-2 en 1h 33. Para finalizar el turno de individuales, Hubert Hurkacz, 16º, y Frances Tiafoe, 11º, jugaron un crucial duelo que cayó del lado del estadounidense, que salvó una bola de set en la primera manga, y se impuso por 7-5 y 6-3 en 1h 14.
Para finalizar, Hurkacz volvió a saltar a pista para hacer pareja con Gael Monfils para enfrentarse a Auger-Aliassime y Shelton con el objetivo de reducir la diferencia entre ambos equipos en el marcador, pero no tuvieron éxito. Los americanos vencieron por 7-5 y 6-4 en un partido que dominaron de principio a fin para ponerle la Laver Cup más difícil al equipo europeo que afrontará la tercera jornada con el agua al cuello.